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Grecia 0 - Corea del Sur 2

La eficacia coreana pone en evidencia a Grecia en casa

Los de Myung-Bo Hong se impusieron en el Giorgios Karaiskakis gracias a los goles de Jong-Woo Park y Heung-Min Son ante una Grecia insuficiente.

Actualizado a
La eficacia coreana pone en evidencia a Grecia en casa
ALKIS KONSTANTINIDIS

La eficacia de Corea del Sur, que aprovechó al máximo sus escasas ocasiones, dejó en evidencia a Grecia, incapaz de imponer su ritmo y su juego y de rentabilizar con goles su dominio. El estadio Giorgios Karaiskakis contempló el ensayo de dos selecciones incluidas en el cartel de Brasil 2014 donde el entusiasmo coreano acogotó al equipo europeo, que evidenció falta de recursos ofensivos y argumentos para dar la vuelta a los contratiempos.

Grecia y Corea del Sur ofrecieron dos caras diferentes. El conjunto heleno que dirige el portugués Fernando Santos, y que en Brasil será rival de Colombia, Costa de Marfil y Japón, se topó con los palos, mientras el combinado oriental firmó dos goles de las tres ocasiones que dispuso. Grecia llevó la iniciativa, el peso del partido y tuvo el balón. Faltó gol. El tanto de Jong-Woo Park a pase de Heung-Min Son, tras un error defensivo del equipo local, condicionó el encuentro. Grecia reaccionó y durante varios minutos cercó el área de Sung-Ryong Jung.

Fue en ese tramo cuando en la misma jugada la pelota se negó a entrar en la portería. Los postes, en dos ocasiones, salvaron al combinado que dirige Myung-Bo Hong, uno de Jose Holebas y a continuación un remate de Konstantinos Mitroglou. Corea del Sur, que en el Mundial se topará con Rusia, Bélgica y Argelia, se encontró el partido como quería.

Grecia prolongó su dominio en la segunda parte pero su dominio no tuvo premio. Golpeó otra vez en el palo y Giorgios Samaras, Mitroglou y, después, Lazaros Christodoulopoulos marraron claras opciones. El mazazo definitivo para el conjunto europeo llegó cerca de la hora de partido, cuando Heung-Min Son pilló descolocada a la zaga rival y aprovechó el pase de Koo Ja-Cheol para batir a Panagoitis Glycos. El acierto del jugador del Bayer Leverkusen hundió a Grecia, que perdió gas y fe con el paso de los minutos.