El perfil
Mateo Musacchio, el jefe de la zaga que llamó a filas Passarella
El defensa argentino del Villarreal fue un futbolista precoz. A los 16 años, el ahora central amarillo ya se entrenaba con el primer equipo del River Plate, donde Passarella le pulió.
Mateo Musacchio ha heredado los galones de la defensa de Gonzalo Rodríguez. El argentino fue un futbolista precoz. A los 16 años, el ahora central amarillo ya se entrenaba con el primer equipo del River Plate. Y no lo hacía de la mano de un entrenador más. Quien le llamó a filas para la primera plantilla fue Pasarella. Y si hay alguien que sabe de defensas en Argentina ese es Passarella. Con esas credenciales lo reclutó Fernando Roig para el Submarino, ya con 18 años recién cumplidos.
En principio, aterrizó en Villarreal para jugar en Segunda División, con el filial amarillo. Pero en menos de un año, ya era uno más en la primera plantilla. Tres años después, con tan sólo 21 años, es capitán del equipo junto a Bruno, y el auténtico pilar y sostén de la defensa. Musacchio no es un defensa corpulento, atlético o expeditivo, de esos que impone nada más verlo. Al contrario, es más un defensa del perfil que ya tuvieron en Villarreal Gonzalo Rodríguez o un poco más atrás, Quique Álvarez: zagueros que manejan bien el balón, que sacan la pelota siempre con criterio y que ganan más por estar bien colocados siempre en el lugar adecuado, que por su físico. Musacchio llega allí donde se le necesita y sobre todo genera soluciones, donde otros generan nervios.