Valladolid
Carlos Suárez: "JIM sería el técnico incluso en Segunda"
El presidente analizó el momento actual de su club, desde los horarios de partidos, fichajes, renovaciones, hasta la inminente salida del proceso concursal.
Tertulia desde el Restaurante Vino Tinto con el presidente Carlos Suárez en un momento idóneo por la cantidad de temas que hay sobre la mesa, desde los horarios de los partidos, hasta la inminente salida del concurso de acreedores, pasando por la situación deportiva.
Las primeras valoraciones llegaron entorno al tema de tener que jugar ante el Celta en diciembre, en Valladolid, a las 22:00 horas, posiblemente bajo cero: “Los horarios se cubren en función de la televisión. Lo que estamos luchando es contra el partido de los lunes en abierto, que es una expropiación de nuestros derechos, ya que ¿por qué se ha de dar un partido en abierto si nosotros no queremos? Estamos peleando contra esto, porque de ahí salen estos horarios que son, a veces, horrorosos; nos perjudica porque necesitamos el apoyo de nuestra gente y así es difícil que vayan; es un horario criminal y colocan los horarios al tun-tun. Lo cierto es que, aunque parezca incongruente, la asistencia al campo ha subido; hemos bajado los precios y haremos paquetes para nuestros abonados para que vean al Madrid y Barcelona”.
El partido ante el Rayo en la Copa fue deficitario y Suárez explicó como potenciaría esta competición: “Con eliminatoria a partido único y buscando fechas adecuadas. Sólo encender las luces cuesta 4.500 euros, nosotros ante el Rayo perdimos dinero. Los grandes tienen que asumir que la Liga y la Copa son de todos, aunque ellos siempre serán grandes”.
Carlos Suárez aseguró que “en el siguiente contrato de televisión se intentará buscar más equilibrio en el reparto, con proporciones de 4 a 1, cuando ahora es de 12 a 1”.
Límites. Entrando en el capítulo de fichajes en el inminente mercado de invierno, el presidente habló de las posibilidades del Valladolid para reforzarse: “Es difícil, porque gastamos en verano y dejamos un poco para el invierno, unos 200.000 euros. En total teníamos 11.200.000 euros para hacer la plantilla. El Valladolid intenta fichar a jugadores que sean buenos, independientemente de dónde sean. Si hay posibilidad, traeremos algo, no queremos ser los más ricos del cementerio, pero dentro de esos límites”.
Sin entrar en la parcela de Marcos, el presidente dijo que “es complicado elegir un puesto a reforzar; tendría dudas, pero elegiría entre la banda y el central”. Esta respuesta abre el tema Heinz, que se quedó fuera de la convocatoria en la Copa, con lo que parece que ya no cuenta para nada en los planes de Juan Ignacio, pero Suárez fue pragmático: “Es jugador del equipo. Cuando uno no juega puede ser por tres razones: porque no gusta al entrenador, porque no hace bien su trabajo o por que los que lo ficharon se equivocaron. Se vio lo que podía dar y por eso se le fichó; si no está dando esa medida, me parece que va a tardar en jugar. En general hemos intentado mejorar la plantilla con la base del año pasado y podemos equivocarnos”.
Con el equipo en puestos de descenso, llegó el momento de hablar de Juan Ignacio y ahí no tuvo dudas el presidente: “No corre ningún peligro, pase lo que pase, confío en su trabajo, más allá de los resultados. Su trabajo es muy bueno y le avalan sus anteriores”. Suárez firmó a Juan Ignacio tres años y tanto confía en él que a la pregunta ¿seguiría siendo JIM el entrenador aún si el equipo bajara? contestó: “Salvo que vea cosas muy graves o que él no quiera seguir (hay una cláusula para ambos) yo diría que sí, basándome en su trabajo y en su implicación. Son honrados y estoy contento con su trabajo y lo digo porque he tenido algún entrenador anterior que se quedaba jugando al golf en vez de venir a entrenar”.
Mendilibar. La situación de los entrenadores y los presidentes ha cambiado en los últimos tiempos; ahora hay más paciencia y se da más tiempo a los proyectos, bien por la crisis, bien por que se ha ganado en cordura: “Este año estoy convencido de que no nos toca descender. Hemos buscado la continuidad de un trabajo que Juan Ignacio estaba haciendo y también se estaba haciendo en nuestro equipo. Hemos tenido muchas bajas y todo cambiará en cuanto ganemos dos partidos seguidos; el equipo necesita cariño y yo estoy tranquilo y la tranquilidad es la piedra en la que cimentar la permanencia”. Carlos Suárez confesó que se arrepentía de “haber cesado en su día a Mendilibar, me equivoqué, aunque él llegó un momento en el que tampoco se veía con fuerzas”.
Acabando la charla, Suárez aclaró sobre las renovaciones que “con Guerra se habló en su momento, pero ahora no hemos hablado más. Si quiere renovar, perfecto y sino, no tengo dudas de que nos ayudará hasta el final. Víctor está cerca de renovar y sólo falta limar aspectos. Ebert es un tema que lleva Marcos que ya habló con él”.
Por último, el presidente aseguró sobre la salida del concurso de acreedores que “estoy seguro que se alcanzará el necesario acuerdo con más del 50% de los acreedores y después quedaría llegar a un acuerdo con los acreedores privilegiados. A partir del día 8 de enero el Valladolid podría quedar con una deuda de unos 40 millones de euros a pagar en ocho años afrontando un calendario de pagos en el que queremos perjudicar lo menos posible a los de aquí”.