Real Madrid
Florentino quiere renovar a Cristiano Ronaldo en Los Ángeles
El presidente blanco pretende lograr el 'sí' del crack a falta de negociar los flecos con Mendes. Cristiano ha cambiado su idea de marcharse tras cumplir su contrato (hasta 2015).
Florentino Pérez viajó a Los Ángeles al frente de la expedición madridista por segundo año consecutivo. Pero en esta ocasión, lo ha hecho con un objetivo claro: dejar encarrilada la renovación de Cristiano. Desde hace varios meses, esa negociación está enquistada y apenas ha sufrido avances, salvo las tomas de contacto llevadas a cabo por el presidente y Jorge Mendes al término de la temporada pasada. En ellas, el agente del crack le explicó a Florentino los motivos por los que el jugador estaba molesto con él y las razones que le habían llevado a presentarse en el despacho presidencial el pasado 1 de septiembre de 2012, en la previa del partido ante el Granada, para manifestarle que se sentía "triste".
Así las cosas, y sabedor de la fórmula para lograr el "sí quiero" del portugués, el presidente blanco se ha pasado gran parte del verano asegurando que "el club hará todo lo posible para que Cristiano sea feliz y se retire en el Madrid". Pues bien, ha llegado el momento de que Florentino se lo haga saber personalmente al propio jugador. De ahí que a lo largo de la presente concentración en Los Ángeles tiene programado reunirse con el crack y sentar las bases para dejar prácticamente sellada su renovación y mejora de contrato. Si todo marcha por buen camino, sólo quedaría que Jorge Mendes negociara los flecos finales.
En la declaración de principios realizada por el presidente madridista en los últimos meses, hizo mucho hincapié en su intención de convertir a Cristiano "en el futbolista mejor pagado del mundo". De ahí que las cifras que se barajan en estos momentos rondan los 14,5 millones netos que cobra Ibrahimovic (PSG) y los 20 que percibe Etoo (Anzhi), que sigue siendo el futbolista con el mayor salario del planeta.
Punto de inflexión. Precisamente, esas manifestaciones realizadas por el presidente en las numerosas entrevistas que ha realizado a lo largo del verano han sido una de las claves para que Cristiano haya cambiado su intención de cumplir los dos años que le quedan aún de contrato e irse posteriormente. La otra ha llegado de parte del público del Bernabéu. El crack portugués ahora sí se siente plenamente querido y reconocido por su afición y eso le ha llenado de satisfacción. Incluso, ha visto cómo ahora le aplauden acciones en las que falla, cuando hasta la temporada pasada esas mismas jugadas eran correspondidas con pitos y críticas.
Por ello, el aspecto económico no será el más importante a la hora de convencer definitivamente a Cristiano, puesto que el portugués tiene propuestas mucho más suculentas tentándole para que no acepte la renovación y abandone el Madrid. Alguna de estas ofertas alcanzaría los 23 millones netos por temporada, cifra a la que en ningún caso podría llegar Florentino. De ahí que Cristiano esté dispuesto a hacer oídos sordos a esos cantos de sirena que le llegan de Francia e Inglaterra, pero a cambio espera que el club blanco le dé el trato y la protección mediática que merece el jugador más importante de la historia de la entidad desde Alfredo Di Stéfano.