Se sustituyen carteles con la imagen de Roberto Soldado

Amadeo Salvo dijo ayer en un acto promocional en Requena que "afortunadamente a día de hoy Roberto Soldado sigue siendo jugador del Valencia". En verdad el caso Soldado tiene tantas ramificaciones que hay que hablar de ellas por separado. Por un lado, el club no quiere traspasarle. Cuenta con Soldado y de ahí que ni se plantearan aceptar los 26 millones más cuatros en variables a pesar del buen papel que harían en las arcas del Valencia. Pero, a su vez, se le busca sustituto y cada día con más ahínco. Como también va a más la sensación de guerra fría entre club y el entorno del capitán. Todo ello sucede a la vez y por separado y pendiente de una decisión que no llega: la del Tottenham.

No hay noticias del club inglés. Hasta el día 2 tienen de plazo para llegar con 30 millones y aceptar las condiciones de pago que impone el Valencia (dos plazos de 15 millones). Soldado aparecerá antes por Paterna (el sábado regresa de sus vacaciones, salvo llamada de Londres en las próximas 48 horas). Mientras, en el Valencia se curan en salud y en imagen. El club tomó ayer la decisión de sustituir los carteles de taquillas y alrededores de Mestalla en los que aparecía la imagen de Soldado y Balotelli anunciando el partido entre el Valencia y el Milán. Según fuentes del club no se han hecho unos nuevos para la ocasión sino que se han cambiado por otros ya existentes en los que aparecen los precios y los escudos de los dos equipos. Sea como fuere Soldado ya no aparece en taquillas, aunque el rastro del capitán aún copa las tiendas.

Plan B. Mientras, la lista de futuribles para el Valencia si se fuera Soldado va en aumento. En verdad hay dos: una mediática y con la que se asume que se rompería el tope salarial, encabezada por el brasileño Fred y Chicharito (en su caso se negociará su cesión); otra más doméstica, en la que el mejor colocado es Postiga y en la que aparece también Sergio García.