El arco de San Mamés ya está troceado y ahora espera su viaje

El arco de San Mamés, auténtico símbolo del Athletic, ha sido dividido en tres partes y reposa ya cerca de la Tribuna Este, lejos de la Principal, sobre la que ha reposado durante sus sesenta años de existencia y que caerá definitivamente los próximos días. La estructura, de 115 metros, se dividirá en doce pedazos para ser trasladado a Lezama, donde permanecerá para siempre.

Mientras, el club diseña ya la operación salida. Raúl puede ser enviado al Numancia en calidad de cedido, y el Athletic negocia la rescisión del contrato de Zubiaurre. Tras un sinfín de idas y vueltas, regresa tras el préstamo al Salamanca y en 2014 finaliza el largo contrato que firmó en Bilbao. Isma López ha pasado un año en casi blanco y podría ser el siguiente, en dirección a Lugo