España brilla en el primer test previo al Mundial Sub-20

La Sub-20 ganó a Paraguay en Benidorm en el primer amistoso previo al Mundial de Turquía que disputará desde el próximo 21 de junio. Y las sensaciones fueron muy buenas. España tomó el mando del partido desde el arranque, como le gusta. Suso, más retrasado de lo habitual, fue el encargado de iniciar el juego junto a Saúl y al jugador del Liverpool se le vio muy suelto, con Jesé y Deulofeu esperando en los costados y Denis flotando por delante. El ritmo de juego también convenció en esos primeros compases. España dominó, pese a la presión agresiva de Paraguay al borde del área, y fue acercándose de manera amenazante a la portería de Morel.

Tuvo que ser a balón parado, eso sí, como se adelantase en el marcador. Suso templó un balón al saque de una falta y el central sevillista Israel Puerto lo remató de cabeza adelantándose a todo el mundo. El premio a las intenciones y al dominio era justo, aunque no pasó de una exigua ventaja en el marcador. Jesé y Deulofeu no entraban en acción más que para destellos puntuales de su enorme calidad y la Sub-20 dio bueno el escenario, con el riesgo que eso suponía.

Riesgo, por ejemplo, de dejar el designio del partido en manos de Mateu Lahoz, el árbitro del choque, que pitó un penalti por agarrón de Puerto más que discutible. El central Matías Pérez lo convirtió con calidad y dejó visto casi para sentencia el primer tiempo, aunque eso es mucho decir con jugadores del talento de los españoles en el campo. Dicho y hecho. Jesé se enchufó por la derecha en la última acción antes del descanso, puso un centro raso y Deulofeu, llegando al segundo palo, reconstruyó la situación tal y como merecía.

El segundo tiempo mantuvo la inercia del primero, aunque los cambios frenaron tanto el ritmo que acabaron por apagar el partido. Aún así, se sucedieron las muestras de calidad de los españoles. Denis Suárez, tras un caño, regaló el tercero a Deulofeu, al que se adelantó por poco Morel, Suso también lo intentó desde lejos con un zurdazo medido y Jairo se unió a la fiesta en una posición de falso nueve en la que sacar a relucir su movilidad.

Paraguay seguía mordiendo la salida de balón y cada vez fue más agresiva. Un error del recién entrado José Rodríguez propició una de sus mejores ocasiones, aunque el lanzamiento de Villamayor se marchó alto. España mantenía la idea y la aderezaba con detalles como el del zurdo del Athletic Aketxe, que cada vez que intervino fue para inventarse una filigrana.

También de Suso, extraordinario hasta que se retiró en un puesto más cercano al mediocentro. Incluso el cordobesista Fede Vico pudo sentenciar en un mano a mano que no acertó a definir. Sin embargo, fue Bernat quien puso la guinda a su gran partido como lateral izquierdo llegando desde atrás al más puro estilo Jordi Alba. Quedan 40 días para el Mundial y España está en el buen camino. No hay duda. El estilo no se negocia y los jugadores siguen saliendo.