El Zaragoza se complica la vida ante un guerrero Levante

Salió arrollador el Levante. Mandando. Queriendo evitar cualquier tipo de sospecha que bastante daño están haciendo. Tanto que a los dos minutos ya había pedido un penalti clarísimo por manos de Fernández. Se lo comió el colegiado que poco despúes sí acertó anulando un gol a Acquafresca por fuera de juego. El italiano estaba como nunca. Metidísimo. Luchador. No llegó por milímetros a un centro de Valdo. El Zaragoza las veía venir. Incapaz de frenar a la manada granota. Aún así, los de Jiménez asomaban pero con escaso peligro, por no decir nulo y con el empate se llegó al descanso.

Se esperaba un segundo tiempo vibrante. Más por la tensión y lo que había en juego que por fútbol propiamente dicho. De hecho, de esto último, ni pizca. Y también por que Gil Manzano siguió con su recital y decidió fulminar a Diop cuando se llevó, involuntariamente, a un rival por delante. Era el momento del Zaragoza. Y apretó. Era el más necesitado. Pero ni se notó esto ni que jugaron con uno más. Postiga falló de todos los colores. Y, aún así, la mejor ocasión estuvo en lacabeza de Iborra con paradón de Roberto. Keylor no quiso ser menos y sacó dos buenas manos que hubieran sido el triunfo visitante. Buena falta les habría hecho.