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Valencia

Valverde: "No hay cansancio, como al final del partido"

Ernesto Valverde cunde con el ejemplo: intensa sesión y paga su multa. El Txingurri avisa: tiene claro que en Zaragoza la intensidad será clave para poder ganar el partido.

Actualizado a
Víctor Ruiz no supo qué hacer con el balón, el Txingurri se acercó, cogió el balón y lo despejó.
Alberto Iranzo

Cada día que pasa Valverde va dejando muestras de todos los secretos de su trabajo. Ésos que han hecho que el Valencia haya cambiado tanto que parece otro equipo al de hace dos meses y es que sus entrenamientos son un lujo. Ayer dio un recital de intensidad, carácter y de liderazgo: a su trabajo más táctico de precisión en el pase, de presión sin balón y de generar espacios con el esférico, sumó el motivacional porque sabe que el de Zaragoza es un partido trampa de esos que bajas el pistón y cuando te das cuenta lo pierdes 2-0.

De la boca del Txingurri no pararon de salir frases motivadoras para que sus pupilos no bajaran el pistón: "No hay cansancio, como si fuera el final del partido"; "se va a tope, esto que hacéis es trabajar de verdad"; "presión, más presión... muy bien y ahora abrimos campo, eso es". Se vio al Valverde de carácter, hasta ahora la cara de mayor intensidad del técnico extremeño y es que sabe que el partido de la Romareda es de los importantes, ya que el Málaga jugó Liga de Campeones este martes, habrá cansancio en los de Pellegrini y encima visitan el Benito Villamarín por lo que hay una oportunidad real de asaltar la cuarta plaza en la Liga si consiguen traerse los tres puntos de la capital aragonesa.

Bajo control. El Txingurri exige, pero sigue premiando el esfuerzo: a su zaga 'titular' les hizo trabajo específico y acabaron antes para tenerlos en perfectas condiciones: Joao, Guardado y Costa acumulan muchos minutos y los cuidó. Trabajó la salida del balón y la presión sobre la defensa rival y no paró de corregir movimientos tácticos para que en la Romareda los de Manolo Jiménez sufran. Estuvo pendiente de los dos canteranos: Tano y Quintanilla, de los cuales saldrá uno para viajar mañana con el equipo, e incluso tuvo tiempo de hablar tranquilamente con el Guaita para corregir detalles de sus saques de portería. E hizo 'terapia' con Mathieu y Piatti, al bromear con un concurso de lanzamientos al final. El catálogo del Txingurri.

Invitó a la plantilla a comer

Hace dos semanas un vuelo que traía de Bilbao a Valverde se retrasó por una avería con el avión y eso no le permitió que llegara a tiempo al entrenamiento. Llegó por la tarde a Valencia y el día siguiente dijo a su plantilla que pagaría la correspondiente multa- Ayer se llevó a los jugadores, a su cuerpo técnico, a los servicios médicos del club y a los empleados del día a día del primer equipo a comer a mediodía. Sirvió para hacer grupo.