Rosell reivindica a Núñez y es inflexible con Joan Laporta
El homenaje a Nicolau Casaus alumbra la vieja trinchera blaugrana. El club azulgrana desea que se ejecuten los avales de Joan Laporta y su junta directiva.
Si existe un día que pueda resumir el carácter cainita del Barcelona, ése fue ayer. Por la mañana, el portavoz de la junta directiva, Toni Freixa, explicaba que el club no se planteaba ni por asomo sugerir al socio Vicenç Pla que no pidiera la ejecución del aval de 23 millones exigido a Laporta y siete de sus directivos. Horas después, el socio en cuestión se reafirmaba en su intención de ir a por el presidente que ganó seis títulos en un año mientras los agraviados echaban pestes contra la actual junta denunciando una conspiración. Ya por la tarde, en un acto convocado para homenajear el centenario del nacimiento de Nicolau Casaus, Sandro Rosell se mantenía inflexible con su predecesor al tiempo que reclamaba al auditorio reiteradas ovaciones para Josep Lluís Núñez, que a pesar de estar condenado por delitos fiscales, se dio un baño de masas en el escenario de la Sala París, cuyo nombre recuerda el escenario del primer gran éxito europeo del Barça de Laporta. Núñez, que dirigió el Barça durante 23 años, reapareció rodeado de incondicionales que aclamaron sus intervenciones en recuerdo de Casaus, un barcelonista de rancio abolengo que pasó de feroz opositor al estilo Laporta a fiel escudero del presidente Núñez, al que sacó de más de un apuro. Seguramente, Casaus sería el hombre ideal para lidiar con el embrollo de los avales.
"Sandro y Freixa están detrás de las demandas"
Joan Laporta y Alfons Godall, expresidente y exvicepresidente del Barcelona afectados por la denuncia de Vicenç Pla, no dudaron ayer en considerar que todo lo que se oculta tras la denuncia del socio es una fastrupia propiciada por la actual junta cuando estaba en la oposición. Laporta, que habló en Catalunya Ràdio dijo que "lo que vivimos es insostenible porque es una tortura procesal para desprestigiarnos y arruinarnos la vida. No tengo dudas de que Toni Freixa (portavoz de la junta actual) ha impulsado toda esta cuestión. Freixa sabe perfectamente quiénes son estos socios y es él quien ha impulsado toda esta cuestión, es vergonzoso".Por su parte, Alfons Godall, en la Cadena SER defendía que "desde que se fueron de la Junta Rosell y Freixa, lejos de hacer suyas las decisiones que se habían tomado hasta el momento, se dedicaron desde fuera a poner trabas, a promover el voto de censura y a promover diversas acciones jurídicas entre las cuales está ésta, son los que están detrás de las demandas".
