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RAYO VALLECANO

La Concursal reclama 188.200 euros a Sandoval

Los administradores concursales estiman que el preparador cobró esa cantidad indebidamente días antes de que la sociedad fuera declarada en Concurso de Acreedores.

Actualizado a
La Concursal reclama 188.200 euros a Sandoval
JESUS ALVAREZ ORIHUELADIARIO AS

Ayer se celebró la vista por la demanda incidental que interpuso la Administración Concursal, en la que se encuentra el Rayo, a José Ramón Sandoval, exentrenador del equipo vallecano, en marzo del año pasado. En ella solicitaba que el ahora técnico del Sporting devuelva a la entidad franjirroja 188.200 euros netos.

El motivo es que los administradores concursales estiman que el preparador cobró esa cantidad indebidamente doce días antes de que la sociedad fuera declarada en Concurso de Acreedores, el 27 de junio de 2011. Según los concursales, Sandoval cobró esa cantidad como pago a cuenta de un contrato privado, que, además del ofi cial, técnico y club tenían suscrito para el curso 2010-11.

Y consideran que el pago supuso una vulneración del principio de igualdad de trato que la Ley Concursal establece para el resto de acreedores de la entidad, como el resto de trabajadores del club y la plantilla, los que por imperio de la Ley no pudieron cobrar por esas fechas cantidades devengadas de esa temporada. José Plaza, uno de los administradores concursales, llevó el peso en defensa de la tesis del club.

Le apoyó un abogado del bufete de Javier Tebas, encargado de llevar este Concurso de Acreedores, mientras que José Luis Fraile defendió los intereses del técnico, que no quiso hacer declaraciones.

Movilla recurrió su sentencia

Movilla fue el primer componente de la plantilla rayista de la temporada 2010-11 al que los administradores concursales del Rayo interpusieron una demanda incidental. El centrocampista la tiene recurrida, pero una sentencia del mes de julio de 2012 anuló el contrato de renovación firmado entre el jugador y el Rayo en febrero del 2011, en el que se contemplaba que el futbolista cobraría 900.000 euros, además de variables por partidos jugados y objetivos y una ayuda para la vivienda, al considerarlo perjudicial para la masa activa y, aunque no apreció mala fe en Movilla, le redujo el salario bruto a 327.589 euros.