Zaragoza - Betis
Postiga frente a Castro
Reválida para el Real Zaragoza en casa frente a un Betis europeo. Los maños viven sacudidos por la decisión de Aranda de marcharse en este mercado invernal.
La fragilidad del Zaragoza en casa -cinco derrotas en ocho partidos- frente a la exuberancia del Betis a domicilio. La Romareda inaugura el año futbolístico en la Liga con un partido abierto, de pronóstico incierto, en el que el equipo de Jiménez tiene como obligación detener su sangría como local y dar continuidad al gran partido que dejó en San Mamés, mientras el Betis, instalado en una espléndida quinta plaza, aspira a quitarse la espina de su inesperada derrota frente al Mallorca en el Villamarín para continuar en los puestos de privilegio.
El Zaragoza vive sacudido por la decisión de Aranda de marcharse en este mercado invernal, un empeñó cuyas secuelas se dejaban ver ayer en el rostro y en el discurso de Manolo Jiménez: "No tiene la cabeza en el Real Zaragoza y no piensa como zaragocista". El club aragonés no va a regalar a Aranda de ninguna manera, pero su polémica enturbia en cierta manera un enero de cierta felicidad después de tres inviernos angustiosos.
Cañas y Beñat. En el Betis también hay ruido de maletas. Cañas jugará con un ojo puesto en el Swansea y Beñat continúa de boca en boca por el interés latente del Athletic. Además, el nigeriano Nosa se marcha mañana a la Copa África, igual que Romaric, baja de última hora.
Jiménez repetirá el once de San Mamés, con la pareja Movilla-Apoño a los mandos, mientras a Mel se le ha caído toda su banda izquierda (Álex Martínez y el ex zaragocista Juan Carlos) y podría alinear a Salva Sevilla -al que Jiménez quiso fichar en verano- por detrás de Rubén Castro, ejecutor del Zaragoza en la pasada temporada (0-2). Su duelo contra Hélder Postiga puede marcar la noche.
Mel viaja a lo Guardiola otra vez
El Betis aprovecha que el partido se disputa por la noche y también de que existe conexión matutina y directa de AVE a Zaragoza para viajar hoy mismo hacia la capital aragonesa, donde dormirá la siesta antes del encuentro. Será la cuarta ocasión en que Pepe Mel desplaza a su gente tal y como lo solía hacer Guardiola en su Barcelona (el mismo día), algo que le ha dado buenos réditos al conjunto verdiblanco, pues en las anteriores tres ocasiones logró victorias en Valladolid, Getafe y Vigo.