"No puedo vivir sólo pendiente de un premio individual"

Un año más está entre los tres finalistas para ganar el Balón de Oro. ¿Cree que, después de llevarse la Liga con el Madrid y llegar a las semifinales de la Eurocopa con Portugal, alzará su segundo premio tras el de 1998?

No puedo vivir pendiente de un premio individual, no sería justo. La carrera no queda marcada por los trofeos individuales, sino por los colectivos. Cuando se sepa la decisión, quizá quede muy contento, quizá quede triste..., pero es ley de vida. Si se gana, perfecto; si no, paciencia, la vida continúa, voy a seguir siendo la misma persona. Es obvio que me gustaría ganarlo, no voy a ser hipócrita ni mentiroso, es algo que ambiciono, pero no puedo pensar que es el fin. No puedo pensar que si no lo gano el mundo acaba, no. Injusto o justo, será lo que tenga que ser. Por eso, hay que vivir tranquilo, continuar siendo feliz y hacer las cosas que sé hacer.

¿Siente lo mismo cuando juega con el Madrid que cuando lo hace con la camiseta de la selección portuguesa?

Una cosa es jugar con tu club y otra con la selección, son sentimientos totalmente diferentes. Es verdad que la pasión por ganar y por competir es parecida, pero existe una implicación más sentimental cuando lo hacemos por nuestro país.

Ya ha llegado a las 100 internacionalidades con Portugal. Sólo Figo y Fernando Couto le superan...

Ir a la selección es un éxito para mí, un privilegio, no es casualidad que recientemente pudiera llegar a esa cifra histórica. Como dice, en la historia sólo hay dos jugadores que lo han conseguido y para mí, llegar con sólo 27 años, fue algo único. Ahora soy uno de los capitanes y eso me llena de alegría y orgullo. Espero sumar más internacionalidades e intentar aportar el máximo de mis capacidades como jugador para poder llevar a Portugal a lo más alto posible.

¿Se ve como el máximo goleador de la historia de la selección?

Las cosas pasarán de manera natural. Lo más importante para mí es conquistar algo para el país, para la selección, porque los récords individuales acaban siendo algo relativo. Son importantes, sí, pero lo más importante es ganar algo con Portugal. Éste es el momento, por lo que hemos hecho en los últimos años. Nos ha faltado ganar un trofeo importante.

¿Cree que es posible que Portugal gane un título importante?

Sé que es difícil, sé que es una tarea muy complicada, pero ya estuvimos dos o tres veces muy cerca de lograr algo importante. Y de hecho, en la última Eurocopa fuimos batidos en la tanda de penaltis por la Selección española. Para lograr un título, siempre tienes que tener un poco de estrella, tanto en el club como en la selección, y sinceramente creo que es lo que nos ha faltado en los últimos años.

¿Cómo recuerda su estreno con Portugal? Fue un 20 de agosto de 2003 ante Kazajistán, con Scolari como entrenador.

Estaba nervioso, muy nervioso, llevaba el dorsal 16. Estaba en el banquillo y tenía la esperanza de que podría debutar, y eso es lo que pasó. Fueron los momentos más bonitos con la selección portuguesa.

Portugal va tercero en su grupo de clasificación para el Mundial de 2014, empatado a puntos con Israel pero a cinco puntos de Rusia, el líder...

Sabemos que el margen de error es cada vez menor, no podemos perder más puntos, pero creo que el equipo va a sobreponerse a esta fase menos buena que estamos viviendo. En años anteriores ya atravesamos grandes dificultades durante los partidos de clasificación, No sólo ahora, sino en los últimos diez años, y creo que va a pasar básicamente lo mismo, pero tengo la esperanza de que el próximo año será muy bueno.

¿Cuáles son las claves para que ese camino sea más fácil?

Lo principal es la unión, el espíritu de grupo, entre los jugadores, el entrenador, el presidente... Siempre fue así y siempre va a continuar así. Tras regresar del Europeo, tenemos que volver a concentrarnos y prepararnos bien para el Mundial.