La plantilla rojiblanca ya se concentra en Alhaurín

Gestos de responsabilidad, caras serias y maleta en mano. Los jugadores del Granada acudieron ayer a Los Cármenes para emprender el camino hacia la concentración en Alhaurín de la Torre, un aislamiento del mundanal ruido en busca de un cambio de rumbo en su juego y, sobre todo, en sus resultados. A las diez y cuarto de la mañana partió la expedición con destino al hotel Sol Andalusí, donde llegó con tiempo para instalarse antes del almuerzo y empezar a trabajar sobre las cuatro y media de la tarde. Anquela insistió en la táctica, en la presión y en la finalización de jugadas. Mezcló a titulares con suplentes y todos se emplearon al máximo sobre un campo de hierba natural en aparentes buenas condiciones. El clima también se agradeció, bastante más suave que el intenso frío que azota Granada en los últimos días.

Los jugadores han entendido la concentración de Alhaurín como un aislamiento necesario. Saben que el sábado se juegan mucho más que tres puntos y que el tiempo para reaccionar se acorta a toda velocidad. El rumano Gabriel Torje, un fijo en el once de Anquela, dijo sobre la estancia en Málaga que "parece que hemos retrocedido en el tiempo y es como si estuviésemos en la concentración de La Manga del pasado verano. Mi sensación es que nos estamos concentrando para un año que va a ser muy duro".

Prueba final. No está probado que aislarse de esta manera garantice buenos resultados. Preguntado por los efectos del retiro espiritual, Torje explicó que "si es positivo o no lo veremos el sábado. Tenemos que aprovechar estos días y prepararnos lo mejor posible. Si no ganamos, la cosa se pone muy difícil".

Los tocados evolucionan bien

Los jugadores que arrastran molestias físicas están mejorando y se espera que todos puedan estar disponibles frente a la Real Sociedad. Toño, Jaime, Benítez, Brahimi y Borja Gómez aún no están al cien por cien pero sus sensaciones son positivas. La recuperación de los tres primeros está garantizada mientras que hay ciertas dudas en los casos de Borja y Brahimi. Con respecto a Borja, si persisten los problemas se quedará, cosa que ya sucedió la pasada semana; Brahimi está entre algodones para no sufrir una recaída.