"Muchos dirán que no, pero para mí sí que fue penalti"

Pasan los años, ya son más de 40, y aún se recuerda como si fuera ayer aquel Córdoba-Barcelona que le dio la Liga al Real Madrid...

Fue un partido magnífico del Córdoba, que estaba descendido y jugó muy tranquilo. Poca gente se lo esperaba pero fuimos capaces de conseguirlo contra todo pronóstico.

¿Por qué dice que nadie lo esperaba? Usted era el presidente y sabrá mucho del tema.

Se puso en duda la honorabilidad tanto del Córdoba como del Barcelona. Muchos pensaron que nos dejaríamos ganar sin oponer resistencia.

Cuentan los participantes que sí hubo una prima del Madrid...

Yo no las vi, pero se habla de unas 100.000 pesetas por jugador.

Es que había nexos entre su Córdoba y ese Madrid.

Se referirá a que con nosotros jugaban Fermín, Del Bosque y Sanchís, que llegaron del Real Madrid esa temporada. Fue por el traspaso de Verdugo, unos ocho millones de pesetas. Sanchís vino libre.

Alguna llamada desde la capital sí recibiría...

Me llamó Antonio Calderón para ofrecerme una prima y les dije que hablaran con los futbolistas que él conocía.

Usted lo pasaría bastante mal.

Cometí una de las equivocaciones más grandes que hice en el fútbol. Mandé un chófer con mi Mercedes al aeropuerto para que el presidente del Barcelona (Agustín Montal) lo tuviera a su disposición. Me sentí mal. Pero puedo decir que el Barcelona nunca intentó comprar ese partido, aunque en ese momento hubo gente que lo malinterpretara.

¿Fue penalti?

Dirán que no, pero para mí sí fue penalti. Así me lo dijeron mis jugadores y yo también lo vi desde la grada y me pareció que así era. De todas formas no había televisión como ahora para poder ver repetida muchas veces la jugada.

Esa vez ganó el Córdoba. ¿Podrá repetirlo 40 años después?

Es difícil pero no imposible. En el fútbol se ven cosas increíbles y la suerte es un factor esencial. Yo quiero disfrutar.