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REAL ZARAGOZA

Vallecas, una plaza amiga

Vallecas tiene fama en el fútbol español de escenario difícil para el visitante, pero el Zaragoza puede exhibir una estadística notabilísima en sus partidos frente al Rayo.

Actualizado a
PROVIDENCIAL. Roberto le detuvo el curso pasado un penalti a Javi Fuego en Vallecas.

Vallecas es plaza amiga para el Real Zaragoza, una de las mejores de toda la geografía española, junto a los Campos de Sport de El Sardinero. Y aquí están los datos para confirmarlo: el equipo aragonés ha puntuado en once de sus trece visitas al campo del Rayo, incluidas dos en Segunda División, con un balance de cinco victorias, seis empates y sólo dos derrotas, la última hace 16 años.

Con sus reducidas dimensiones (100x65) y su terreno de juego excesivamente duro en invierno y no siempre bien alfombrado, Vallecas tiene fama en el fútbol español de escenario difícil para el visitante. Una fama que se alimenta cada temporada con las declaraciones en las vísperas de los entrenadores. Todos hablan de la estrechez del terreno de juego, de la fortaleza aérea del Rayo, de su presión agobiante... Pero para el Zaragoza es, sin duda, uno de los mejores destinos. Y lo ha sido siempre. No pierde en Vallecas desde la campaña 1995-96 (4-3) y en lo que va de Siglo XXI en Primera ha empatado dos veces y vencido en una (ver cuadro adjunto).

Precisamente en esa última victoria, la de la temporada 2000-01, Paco Jémez, actual entrenador del Rayo, se alineó con el Real Zaragoza en una tarde en la que Vellisca y Juanele decidieron el triunfo (1-2). El once inicial del Zaragoza, que acabó marchándose al final a Segunda División después de 25 años consecutivos en la élite, estuvo formado por Láinez; Pablo, Paco, Aguado, Esquerdinha; Acuña, Chaínho, José Ignacio; Galletti, Vellisca; y Juanele.

El Rayo tardó diez años en volver a Primera y la campaña pasada, en el reencuentro con el Zaragoza en la máxima categoría, el duelo acabó en tablas sin goles, gracias al penalti que le detuvo Roberto a Javi Fuego -objetivo principal de Manolo Jiménez durante todo el verano- a veinte minutos del final y a que el larguero escupió un cabezazo de Movilla, hoy timón del equipo zaragocista en una envidiable segunda juventud.

El Rayo aventaja en tres puntos en la clasificación al Zaragoza, que intentará hacer honor a la historia y recortarle el lunes toda su renta.