Trámite o renacimiento

El embrollo del Espanyol es tal que amanece en esta jornada de Copa, su competición favorita antaño, sin un técnico al que alojar por la noche en el banquillo de Cornellà-El Prat. El misterio se resolverá durante las horas previas al compromiso contra el Sevilla. Lo que está claro es que no suena Míchel, que hubiera figurado en las quinielas un año atrás, pero que hoy tratará de defender la buena renta de la ida, hace un mes, en el Sánchez Pizjuán: 3-1.

El favorito para hacer con Míchel ese brindis de los instantes previos a la Copa es Javier Aguirre, quien situó a Osasuna en una final del torneo. Pero no está descartado Marcelino, y ahí aparecería el morbo: la última experiencia del asturiano fue en el Sevilla, y quien le reemplazó fue precisamente Míchel... Sea quien sea, cosas del destino, debutará igual que lo hizo el recién destituido Pochettino el 21 de enero de 2009: en partido de Copa, entonces con el Barça como rival. Aunque no hagan muchas quinielas -de hecho, adivinar hoy la alineación del Espanyol es como acertar un pleno al Quince- porque incluso Raúl Longhi, técnico del filial, puede ocupar el banquillo de forma interina en esta velada de trámite o épica.

Para el Sevilla, el compromiso adquiere una doble lectura: pasar ronda y reafirmarse en una competición que deja el camino bastante libre hasta la final (los grandes de la Liga figuran en el otro lado del cuadrante) y, por otro lado, completar una buena actuación como visitante. Renquean los hispalenses lejos del Pizjuán, ya que vienen de enlazar cuatro derrotas consecutivas. Contará Míchel con Medel, que se perdió por sanción el último partido de Liga, y también con tres jugadores que se perderán el próximo por idéntico motivo: Fazio, Luna y Rakitic. Babá ejercerá de Negredo, lesionado, en la punta del ataque.

Simao, 'tocado'. Del Espanyol no se conoce ni su convocatoria. Es casi imposible que llegue a tiempo Simao, aquejado de una bursitis, mientras que Sergio García y Galán se lo pierden por sanción. El resto, una auténtica lotería.

Con todo, el Espanyol inicia hoy una nueva etapa. Remontar es difícil, pero valdría un 2-0.