Collet respalda a Pochettino antes del duelo decisivo

La plantilla invitó ayer a Ramon Condal, presidente saliente, y Joan Collet, entrante, al tradicional asado argentino que sirve para conjurarse en momentos complicados. Y éste lo es. Mauricio Pochettino pidió el miércoles unión y ayer ésta se fotografió en Sant Adrià. Fue el estreno de Collet como presidente en un acto de la plantilla, indignada por la sanción de cuatro partidos a Sergio García y de dos Héctor Moreno por las expulsiones de Valencia.

La preocupación ahora de Joan Collet es ponerse en contacto con Ángel María Villar, presidente de la RFEF, para exponer sus quejas por el trato arbitral al Espanyol. "A veces nos hemos sentido muy solos. Necesitamos que el club recobre su estabilidad", declaró ayer Cristian Álvarez.

Al ágape también asistió el director deportivo, Ramon Planes. La fotografía de Collet y Pochettino juntos guarda un especial significado a 72 horas de un partido que puede acabar de sentenciar al técnico, por mucho que el nuevo presidente le haya ratificado en más de una ocasión. La presión de la grada en caso de derrota podía hacer provocar una decisión dolorosa para todas las partes, aunque el presidente ha repetido por activa y por pasiva que Pochettino seguirá en el banquillo pase lo que pase.

Menos votos y más acciones

El club hizo oficial ayer los datos de los votantes en la Junta del lunes. Y se produjo, como se intuía, una contradicción que sólo se puede dar en una Sociedad Anónima Deportiva. El candidato con más votantes fue Sergio Oliveró, que obtuvo 2.660 votos, lo que representa un 59,52 por ciento de los accionistas que delegaron el voto. Joan Collet logró el 30,99. Pero se da el caso que las elecciones las ganó este último por una diferencia amplia, gracias al apoyo de los dos máximos accionistas, Dani Sánchez Llibre y Ramon Condal. Obtuvo un 61 por ciento, por un 38 de Sergio Oliveró.