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Sevilla - Real Madrid | La intrahistoria

La fractura del Gol Norte: días duros en el sevillismo

Atmósfera enrarecida en Nervión.

Actualizado a
<b>PROTESTA. </b>Los Biris no entran al estadio y se quedan en la puerta.

Esta es la historia de una fractura social acelerada. Sólo días después de que el 19 de diciembre la Audiencia Provincial condenase a José María del Nido a siete años y medio de cárcel (caso Minutas), el Gol Norte del Sánchez Pizjuán, sector de los Biris, le recibió con una pancarta: "Estamos contigo, presidente". Apenas pasados nueve meses, la fractura abierta entre la cúpula dirigente y su peña más emblemática es irreconciliable. El Madrid, que ha soportado ambientes hostiles y pancartas ofensivas que iban de córner a córner ("Real Madrid: 100 años robando", le recibió una durante el Centenario blanco), se encontrará una atmósfera inusual: un Gol Norte semivacío y en silencio.

Esta es la sucesión de acontecimientos. El Sevilla fue multado con 90.000 euros por el lanzamiento de bengalas en el derbi sevillano del 3 de mayo más apercibimiento definitivo de cierre. Del Nido, que llevaba tiempo dando toques de atención, meditó entonces extremar las medidas. Una pancarta a final de temporada ("limpieza total del club"), anunció un caldo de cultivo que hirvió el 13 de julio. Miembros del sector más radical de los Biris provocaron una batalla campal en el estadio Puntas Vela al final del amistoso Rota-Sevilla. "Hijos de p, siempre la lían", no se contuvo Del Nido. Y actuó. Entre otras restricciones, obligatoriedad de estar una hora antes en el estadio y cacheos exhaustivos. La ruptura final.

Reacción.

El Gol Norte se vació en señal de protesta en el Trofeo Antonio Puerta y ante el Getafe. Los Biris animan desde fuera del estadio, gritan contra Del Nido y, en su afán por desprestigiarlo, han llegado a colgar pancartas contra él por toda la ciudad, puentes de la SE-30 (circunvalación de la ciudad) incluidos. "A prisión". La situación es incómoda. Hijos de consejeros, exfutbolistas, hasta el hijo de Monchi, han sido asiduos en los últimos años de una zona a la que ha salido una arista no deseada. Viajes europeos, títulos, complicidad. Demasiados nexos de unión. En ese "mágico Gol Norte" del Sánchez Pizjuán, como han cantado tanto tiempo los mismos Biris, ahora sólo hay reproches.