Guardiola deja el Barça y lo sustituirá Vilanova

Pep Guardiola es historia en el Barça y Tito Vilanova, el futuro. Lo que debía ser la confirmación de un secreto a voces acabó convirtiéndose en uno de los golpes maestros de los últimos tiempos. El presidente, Sandro Rosell, apareció sobre el estrado de la sala de prensa del Camp Nou a las 13:35 y habló un minuto para decir que Guardiola no seguía. El técnico azulgrana abrevió su discurso a apenas 90 segundos y, tras los aplausos de muchos de los presentes, el máximo mandatario pronunció el nombre del sucesor en el banco: "Queremos anunciarles que Tito Vilanova será el nuevo entrenador del Barcelona".

De esta manera, Rosell pudo darle la vuelta a la situación, cargada, en cierto modo, de un dramatismo exagerado. "El barcelonismo está más maduro y sólido que nunca. Esta debe ser la base para el futuro. Gracias Pep, gracias por haber perfeccionado un modelo incuestionable. Gracias por haber hecho bandera de los valores y por tu apoyo. Eres el mejor entrenador de la historia del Barça", fue el homenaje verbalizado del presidente a Guardiola, del que reconoció haberse quedado fotut (fastidiado) cuando días atrás le confirmó que no iba a seguir.

Andoni Zubizarreta, ex meta y capitán del equipo y actualmente director deportivo, estuvo sobrio, saliendo al corte en más de una ocasión, pero seguro de haber acertado en la decisión de darle el cargo a Tito. "Guardiola me confió que la apuesta saldrá mejor que bien. Pep hizo grande los valores del Barça, pero Vilanova representa el juego, la idea, el análisis. Le pone horas de sueño y necesitamos esa implicación. Personalidad para poder estar aquí", argumentó Zubi, cuyo rostro mostraba la carga de los últimos días.

Cantera.

"Siempre buscamos recursos en casa y encontramos a Tito. Nos queda un mes para que acabe la temporada y desde ahí vamos a trabajar. Nos apretaremos los cinturones y seguro que nos divertiremos mucho", prosiguió Zubizarreta, explicando el porqué de la situación. "Cuando parecía que todo estaba inventado, Pep nos dijo que no, que aún había cosas por descubrir", indicó el ejecutivo, dando por buenas las palabras de Rosell que anteriormente había afirmado que "es el fruto del trabajo de Zubi y la Junta lo ratificó. Si hubiese dependido de mí, Pep seguiría siendo el entrenador, pero eso no pudo ser".