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Shilton

"Nunca le daré la mano a Maradona; no me pidió perdón"

No es casualidad que a todos nos suene Peter Shilton: ha jugado más partidos con Inglaterra que nadie (125), permaneció 30 años en la élite, ganó la Copa de Europa con el Nottingham Forest en dos ocasiones. Le fuimos a buscar para hablar de Maradona, De Gea, Mourinho...

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"Nunca le daré la mano a Maradona; no me pidió perdón"

Recuérdenos lo del Nottingham Forest, algo impensable en el fútbol de hoy

Fue increíble incluso en aquella época. Subimos a Primera tras acabar terceros y al año siguiente ganamos la liga. Y luego nos llevamos la Copa de Europa dos años. Brian Clough era un genio.

¿Cómo es que no jugó en un equipo de los grandes?

Casi ficho por el Manchester United y el Arsenal, pero para mí lo importante era estar bajo las órdenes de buenos entrenadores. Bobby Robson por ejemplo, un gran preparador, o Alf Ramsey, que era sobre todo un excepcional entrenador de personas. Brian Clough era ambas cosas. En la película Damned United se centra en su corto periodo en el Leeds, un ejemplo magnífico de lo difícil que es reciclar un equipo lleno de veteranos.

¿O sea, que el futbolista siempre ha tenido mucho poder o lo de ahora es excesivo?

La ley Bosman no ha ayudado. El progresivo aumento de influencia de los futbolistas obliga al entrenador a ganarse su respeto constantemente, porque a menudo es el eslabón más débil.

El Forest fue un equipo vanguardista

Podíamos hacerlo todo: defender atrás y no encajar goles, contraatacar o abrir las defensas con paciencia. Le metimos cuatro al Manchester United en Old Trafford, un partidazo que todavía se recuerda.

Hay quien compara a Clough con Mourinho.

Tienen similitudes, sin duda. Saben que el cocktail consiste en hacer las cosas sobre el césped lo más sencillas posible. Si a eso se le añade un poco de magia y grandes personalidades, ahí tienes a un gran equipo. Y además ambos son capaces de ganarse al jugador que acaba dándolo todo por ellos porque sabe que entregarse al entrenador es el camino para ganar, para mejorar.

Hay muchos preparadores, periodistas que no pueden evitar sentirse especiales cuando Mourinho les acerca a su círculo íntimo.

Clough era similar. En el debut de Roy Keane, Clough se acercó a él y le dijo, "todo lo que tienes que hacer es pasar el balón a uno de los nuestros". Era su manera de reducir la presión. Sabía cómo conseguir lo mejor de cada uno. Fútbol no es tanto un deporte de tácticas, sino de personas, de la comprensión de sus virturdes, sus defectos, lo que les preocupa, lo que les motiva

Clough tenía un modo peculiar para poner a cada uno en su sitio.

Cuando yo ya jugaba con la selección, me hizo una buena que repitió a menudo. Se duchaba antes que nosotros y se secaba sobre mi ropa, que había tirado al suelo. Yo tenía que esperarme a que acabara y recoger sus toallas y todo lo que había dejado atrás. Hacía reír a todo el mundo menos a mí. Luego me dijo que lo hacía porque me había convertido en la estrella del equipo y tenía que mantenerme con los pies en el suelo.

En el Barcelona, a Bobby Robson le llamaban el abuelo.

Se ganaba a los jugadores de otro modo: le gustaba hacer bromas con nosotros, hacíamos cualquier cosa por él. Pero es verdad que a veces nos preguntábamos si podía aguantar la presión y nos reíamos de él. A Clough le teníamos miedo. Bobby era más fácil de manejar: en el Mundial nos pidió que vistiéramos gorras y camisas mientras jugábamos a golf porque hacía mucho calor. Paul Gascoigne se pasó la tarde sacándose la ropa y Bobby le persiguió sin descanso por el campo de golf para obligarle a ponérsela. Fue el entrenador que me dio la charla táctica más larga (a veces parecía que durara horas) y la más corta: treinta segundos antes de un partido del Mundial. No había nada más que decir, todos sabíamos lo importante que era aquello. Pero alguno estaba demasiado relajado y antes de saltar al campo nos dijo: "Por cierto, nos van a ver 50 millones de personas. Será mejor que no perdamos". Y ahí nos volvimos a enchufar.

¿Qué recuerda de aquel Mundial del Naranjito?

Nos concentramos en Bilbao. Bobby nos dijo que nos lo íbamos a pasar muy bien, en un hotel en la playa. Cuando llegamos, había Policía en las terrazas, con metralletas y todo por temor a los terroristas. El primer día de entrenamientos nos pusieron un tanque a la entrada. ¡Vaya con lo de pasarlo bien! La España con la que nos enfrentamos tenía muchísima calidad pero eran débiles de cabeza. El rival sabía que por mucha posesión que tuvieran siempre se les podía ganar.

Las cosas son diferentes ahora.

Tienen una calidad enorme pero nos tenemos que olvidar de imitarlos. Los ingleses deberíamos combinar las cosas que sabemos hacer bien con la capacidad de mantener el balón, balón largo y pase corto a la vez. Ese es el camino.

Hart acaba con una mala racha de porteros ingleses.

No nos han faltado guardametas con habilidad, sino escasos de técnica. Es pronto para decir si Hart es la solución pero es el único que hay. El problema es la falta de calidad del entrenamiento. Se centra la preparación en reacciones y agilidad, cuando deberíamos mejorar el posicionamiento, leer el partido mejor y trabajar la técnica.

Una solución sería mezclar la calidad de Reina con la de De Gea quizá.

Incluso Reina ha sufrido en ocasiones. Veo en los porteros cosas que son culpa de malos entrenadores: la posición recibiendo centros, cómo se detiene el balón, cómo son demasiado reactivos en lugar de proactivos, no son capaces de parar los movimientos antes de que ocurran

¿Qué le parece De Gea?

A veces parece demasiado inmaduro pero claramente tiene una habilidad natural extraordinaria. El problema es que no toma decisiones lo suficientemente rápidas especialmente en balones al área y no siempre se coloca en el mejor sitio. Es pronto para él, seguro que mejorará. Estoy convencido

Sé que sigue la Liga. ¿El Madrid y el Barcelona serían primero y segundo en la Premier League?

Son dos equipos impresionantes. Vimos lo que el Barça hizo en la final de la Champions. Se pelearían la liga en la Premier, sin duda. Aunque cada semana encontrarían más dificultades que en la Liga.

¿Ve a Guardiola en la Premier?

Es una cultura diferente, su éxito en el Barça no le garantiza nada. Veo que tiene mucha personalidad, que su relación con los futbolistas es cercana, que le respetan pero le aprecian también. Si es capaz de repetir eso en Inglaterra, tendrá éxito.

¿Quién fue el delantero más peligroso al que se enfrentó?

Maradona, un demonio travieso. Pero buenísimo.

En Argentina es un héroe por la mano de Dios...

Incluso Gary Lineker dijo un día que hubiera hecho lo mismo y en Inglaterra se le considera un santo. Henry lo hizo contra Irlanda. Un portero que saca el balón de dentro de la portería cuando ha cruzado la línea también está haciendo trampa. Lo único que me molestó es que Maradona nunca se disculpara. Al final de los partidos, si algo se ha hecho mal, entre los futbolistas nos lo decimos, pedimos perdón. Él nunca lo hizo, lo celebró. Su acción fue un acto reflejo, pero su reacción desde ese momento no fue la correcta. Es el mejor jugador contra el que he jugado, pero no le daría la mano si nos encontráramos.