57.000 vikingos empiezan a escribir la nueva era blanca

Pasión vikinga. Llegó el gran momento del white summer. El madridismo disfrutará de la revancha soñada. Esta noche no os valdrá ni la habitual ayuda arbitral (con ello ya contamos, está en el guión de tu amigo Villar) ni la actuación de Els Comediants, ese grupo adiestrado por el dramaturgo Guardiola cuyo reparto de actores principales encabezan Alves (¡camilleros, todos preparados!), Busquets, Pedro y Mascherano. Santi, la verdad tiene un camino y ayer te quedaste de piedra al ver las gradas del Bernabéu repletas. Para un entrenamiento, 57.000 de los nuestros se pegan por ser testigos. Mientras, vosotros habéis hecho amistades con los delfines de Miami, la Fundación de Shakira No me extraña que os echasen de la Casa Blanca.
Ojo a Messi. Mientras que Mourinho se ha encargado de diseñar con su pizarra mágica la primera victoria de la Supercopa del cambio, los vigilantes jurado del estadio trabajan a destajo para hacer un seguimiento especial a Messi. Hay decenas de socios madridistas que han decidido acudir al campo con protectores bucales y máscaras de hierro para evitar salir con la cabeza abierta ante una posible enajenación mental transitoria de Leo, ese jugador que deslumbra cada vez que se pone la camiseta de Argentina
Raúl & Cesc. Mira la diferencia de clase, compañero. Mientras que Raúl enamoraba ayer a los germanos con otro golazo de palanca que permite explicar que en Alemania sean todos blancos y merengones, vosotros tenéis al pobre Cesc yendo y viniendo al aeropuerto de Londres. Claro, le queréis mañana en Barcelona para desviar atenciones tras el 3-0 que os espera. ¡A por ellos, oé!