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Liga Adelante | Celta

"Hay que acabar entre los dos primeros como sea"

Trashorras apunta al ascenso directo como claro objetivo

C. Garrido
Actualizado a
<b>AMBICIOSO. </b>Roberto Trashorras quiere ascender de forma directa.
lalo r. villar

El vestuario del Celta ya no oculta sus metas. Un peso pesado de la plantilla como Roberto Trashorras declaró ayer sus intenciones de futuro: "Estamos en una buena situación y no pensamos en el playoff, sino en las dos primeras plazas. Está claro que el objetivo mínimo es jugar la promoción, pero el real tiene que ser el ascenso directo. La mentalidad del equipo es que hay que acabar la temporada entre los dos primeros como sea".

El lucense confía tanto en el potencial del conjunto celeste que no descarta alcanzar al Betis e incluso proclamarse campeón de invierno: "El Betis es un equipo importante de la categoría, que está haciendo una temporada una temporada enorme y que está ahí arriba por méritos propios. De todas formas, no creo que haya nadie inalcanzable en estos momentos. Siempre te hace ilusión estar primero y el trofeo honorífico de ser campeón de invierno es un dulce que no amarga a nadie. No obstante, lo que importa es el final de temporada".

Trashorras, al igual que el equipo, está en un momento dulce de forma. El futbolista de Rábade considera que la clave del éxito es la inspiración: "Lo bueno que tiene este equipo es que hay donde elegir. Si un jugador tiene un mal día o sufre un marcaje individual, siempre hay otro que puede decidir el encuentro. Es fácil entenderse con cualquiera. De Lucas, David, Michu, Joan, Iago o Dani son todos grandes jugadores".

Recuerda su penalti en Vila-Real

Esta semana se cumplió un año de la sorprendente victoria ante el Villarreal en octavos de final de la Copa del Rey. A Trashorras, que marcó el tanto del triunfo de penalti en el descuento, se le ilumina la cara al recordar aquel éxito: "Aquel fue mi momento más feliz con la camiseta del Celta. Recuerdo de que todo el mundo pisaba el punto de penalti antes de que yo tirara. Capdevila, Diego López y compañía quisieron hacer una montaña para que el disparo me saliera defectuoso. Además, había los típicos comentarios para ponerte nervioso y fue una situación extrema porque sabíamos que si el penalti no entraba, nos quedábamos fuera. Por suerte no fue así y fue muy bonito todo lo que sucedió aquella noche".