Villarato, te fastidias

Real Madrid 2 - Getafe 0 | La contracrónica

Villarato, te fastidias

Villarato, te fastidias

Como dice Toñín el Torero: "Si tropiezas dos veces y no caes, avanzas cuatro pasos". Eso ha hecho el Madrid para salir del pozo en un sábado de reconciliación ante un Getafe sin pegada. Pellegrini sale muy reforzado. Y el Barça, ¡a sólo un punto!

Chapeau Bernabéu. El partido estaba plagado de trampas. Las trompetas del Juicio Final señalaban a Pellegrini como si él fuera el que se había metido los cuatro goles de Alcorcón. Demagogia ventajista que no hacía justicia con el ingeniero chileno. Pero el pueblo es sabio. Y el madridista, más. A las 16:40 horas llegó el autobús con los anfitriones enfilando la calle Concha Espina. Ni huevos, ni insultos. Aplausos sinceros, de veteranos y noveles que sabían que no era el día para convertir las cañas en lanzas. Me dio tan buen rollo que intuí que iba a ser una tarde de restauración y no de inmolación. El Bernabéu prolongó esa sabiduría escénica. Sólo unos pitos reprobadores en la primera jugada y, a partir de ahí, todos a una como Fuenteovejuna. Y más cuando apareció el señor de amarillo. El tipo se llama Antonio Miguel, nombre de culebrón, se apellida Mateu Lahoz y es del Colegio Valenciano, lo que debería haberle unido emocionalmente a su paisano Albiol. La que montó este hombre...

Villarato implacable. El Villarato es como la cabra, que siempre tira al monte. Si no llega a ser por el gol legal anulado a Raúl en El Molinón, ahora el Madrid sería líder en solitario. ¡Manda eggs! Los siervos del Villarato no se cortan un pelo y el tal Lahoz debió pensar que es muy chic expulsar a Albiol antes de la media hora por un forcejeo con Soldado estando de espaldas a la portería (era amarilla como mucho). El Bernabéu se sintió ultrajado y humillado. Como nos ven débiles después del 4-0 en la Copa, llegan los hijos del Villarato a rematar en el suelo al gigante malherido. Revanchistas y ventajistas. Además, debió pensar el tal Lahoz, si me acusan de algo les digo que ellos tienen a Megía Dávila, que como es tan vikingo así compensa. Pues no, señor Lahoz. Su arbitraria decisión sólo sirvió para incendiar la grada que desde ese momento rugió como nunca, amedrentando a un Getafe que no entendía nada porque se vio metido en un lío que le llevó al huerto. Jugar con diez no es tan malo si vas con el espíritu metido en una bola de fuego. Lahoz no se salió con la suya, pero seguro que no irá ni a la nevera ni al microondas. No hay castigo para los que escalfan al Madrid...

Pipa, te quiero. Higuaín es el jugador-franquicia de este proyecto por detrás de Cristiano. Su promedio goleador es digno de un Bota de Oro. Juega poco pero pica mucho. Cuando ve la pelota en carrera es como el conejo detrás de la zanahoria.

¡Grande Camacho! El autogol de Piqué pone la Liga al rojillo vivo. Lo festejan las peñas de Mendavia (Navarra), Chinchón, Valverde de Leganés, San José de Calamonte, Baena, Albalat dells Sorells, Piropo Blanco de los Santos de Maimona, Arribes del Duero, José de San Vicent dells Horts y Miguel de Esplugas. El Barça, a un solo puntito. ¡Están rodeados!