La plantilla del Villarreal se ha quitado un peso de encima tras conseguir la primera victoria en Liga. Un triunfo que se le resistía y que había llevado la ansiedad a un vestuario que no encontraba la fórmula para sumar tres puntos de una tacada. Algo que llegó contra el Málaga, aunque con sufrimiento. Sin embargo, los futbolistas del Submarino están convencidos de que esta victoria marcará un punto de inflexión. "La situación era muy mala y se notaba en los nervios que tenía el equipo. A partir de ahora las cosas irán mucho mejor y habrá más tranquilidad", apuntó un Javi Venta que insistió en que "somos conscientes de que necesitábamos ganar ya. Pero ahora es obligatorio seguir en esta línea y no creer que está todo hecho".
Un mensaje en el que también coincidió Eguren. "Había que ganar como fuera y lo conseguimos. No hicimos el mejor partido ni mucho menos, había muchos nervios, pero la clave era vencer. Lo primero que se debe hacer ante esta situación tan complicada es afrontarla. Es verdad que veníamos jugando bien, pero casi siempre acabábamos perdiendo. Necesitábamos como fuera lograr los tres puntos", reconoció el uruguayo, que también lanzó un aviso: "Pero una vez logrado, ni mucho menos debemos pensar que está todo hecho. Esta victoria sirve para ganar confianza, pulir defectos y reiterar las cosas que hicimos bien, como la primera parte o el partido del Lazio".
A pesar de conseguir la victoria, el vestuario también hizo autocrítica. "Al equipo le falta mucho, cuando estás tan abajo las cosas no se arreglan en un día. Al equipo le falta continuidad en el juego, más seguridad y menos nerviosismo. Pero eso se mejora ganando, ya que cuando te metes abajo las cosas no son nada fáciles", dijo Javi Venta. Por su parte, Eguren subrayó que "al equipo le faltan cosas, pero en Roma jugamos mejor y perdimos por no saber cerrar el resultado".
"El camino es el juego de la primera parte"
Tras quitarse la presión de no haber ganado, el objetivo es mejorar el juego. "Hay que seguir con esta línea y trabajar mucho para que sigan los resultados. Y en el tema del juego, si logramos resultados mejorará por sí solo. Te metes tan abajo que no es fácil de manejar. El camino es el juego de la primera parte", insistió Venta. Eguren añadió que "después del 1-1, los nervios en vez de desaparecer se multiplicaron y eso hizo que el equipo perdiera la pelota con facilidad".
