El malestar existente en el Córdoba por el precio de las entradas que ha puesto el Betis para los aficionados blanquiverdes que acudan el sábado al Ruiz de Lopera fue repasado ayer por el presidente José Miguel Salinas. El club sevillano se mantiene inflexible en su postura de mantener los 30 euros para ver el partido en la parte alta de uno de los fondos de su estadio. Ante esa circunstancia, Salinas señaló: "Lamento su decisión, aunque respeto los motivos que les hayan llevado a tomarla. El Betis no ha querido acogerse al espíritu de colaboración establecido por los clubes andaluces de recortar el 50% en los enfrentamientos directos".

El máximo dirigente del Córdoba avisó que se tomarán su venganza cuando el Betis visite El Arcángel: "Todas las idas tienen sus vueltas y cuando vengan en enero tomaremos las medidas oportunas". También habló del cercano derbi ante el Cádiz: "Nos enfrentamos en la tercera jornada, pero no pasará nada, porque ya hemos hablado del asunto". Por citar algunos ejemplos cercanos, la temporada pasada, la entidad blanquiverde decretó día de ayuda económica el partido contra el Xerez y los aficionados azulinos pagaron menos que algunos socios locales.

Por otro lado, Salinas aún se muestra confiado en igualar la cifra de los 9.600 abonos de la temporada anterior. Después de un fuerte empujón en las dos últimas semanas, el proceso de ventas se ha frenado. "Estaba convencido de que iban a responder", aseguró.

Presentó al húngaro Simon

"El fútbol es igual en todos los sitios, así que no tendré problemas para adaptarme". Así se presentó el delantero húngaro András Simon, el undécimo fichaje del Córdoba que llega cedido por el Liverpool. Aunque aún faltan refuerzos, la plantilla quedará cerrada entre hoy y mañana. Se ha apurado para obtener la respuesta de delanteros como Salva o Kepa, pero el fichaje será foráneo. Para el lateral izquierdo gana muchos enteros la opción de Signorino, aunque tampoco se descarta a Paredes y la llegada de otro central.