Michael Bradley, centrocampista de Estados Unidos, fue expulsado en el minuto 87 del partido de semifinales de Copa Confederaciones en la que su equipo eliminó a España (2-0) tras una fuerte entrada a Xabi Alonso.
La expulsión acarrea un partido de sanción y no podrá jugar por lo tanto la final ante Brasil y Suráfrica, así que Bradley, hijo del seleccionador, reaccionó mal y al término del partido esperó al árbitro, el uruguayo Jorge Larrionda, en el túnel de vestuario y no sólo le insultó sino que intentó agredirle. La FIFA tendrá por lo tanto que estudiar esta acción y la sanción al jugador puede ser por lo tanto mucho mayor de lo que iba a ser en principio.