El presidente del Milán, Silvio Berlusconi, aseguró ayer en Italia que quiere hablar con Kaká hoy para dejar claro al jugador los motivos de su venta: "Hoy por la tarde hablaré con él por teléfono. Si dependiera de mí, me lo quedaría. De todas formas, aún no hay nada decidido". Berlusconi hace referencia a las dificultades económicas por las que pasa el Milán. Hasta ahora, su empresa había asumido todas las pérdidas de la entidad lombarda. Pero la acuciante crisis económica hace que esta vez esa vía sea imposible. Los 68 millones de euros que el Milán ha perdido esta temporada son exactamente lo que pagará el Madrid por el traspaso.

El pacto. Berlusconi consiguió acordar con Florentino, después de que Galliani y el padre de Kaká estuvieran en Madrid negociando el traspaso, que éste no se anunciara hasta después de las elecciones al Parlamento Europeo. Si el anuncio se hubiera hecho antes le habría restado muchos votos. El Milán arrastra un gran número de aficionados en Italia y las protestas contra su marcha se extendieron a otras ciudades.