Si todos cedemos un poco, Sergio renovará. Claro que podemos llegar a un acuerdo". Esta frase de Avelino González, padre y representante de Sergio, es el mejor ejemplo de que el mediocentro catalán está dispuesto a hacer un esfuerzo para quedarse en A Coruña. De hecho, el discurso del progenitor de uno de los capitanes ha variado mucho desde aquella primera toma de contacto con Lendoiro en una cena celebrada en la madrugada del 2 al 3 de febrero en A Coruña. Ha pasado un mes y medio y él justifica su optimismo: "No soy negativo y no estoy de acuerdo con los que piensan así (que Sergio no seguirá). Hasta que no nos sentemos realmente a negociar no se puede pensar de una forma u otra. No hay nada imposible".
Avelino González admite que desde entonces no se han reanudado los contactos con el Depor y que ellos se han mantenido "a la espera", pero que "en unos días" tomarán la iniciativa para decantar de una forma u otra la negociación. La única referencia que tienen ambas partes de esta negociación se circunscribe a esa primera y única toma de contacto, en la que sólo había diferencias.
Rebaja en todo. El agente de Sergio admite que existían claras divergencias en el aspecto económico y en lo que se refiere a la duración del contrato, pero están dispuestos a hacer un esfuerzo: "Podemos entendernos en todos los aspectos. Si no firma por tres años, lo hará por dos o con la fórmula de uno más uno; todo es cuestión de hablarlo. Tampoco es insalvable la diferencia que hay en lo que se refiere al dinero. Nosotros estamos dispuestos a ceder y si el Deportivo lo hace...". Sergio lleva ocho años en el Deportivo y tanto él como su padre anhelaban que esté fuese su último contrato profesional y retirarse en A Coruña.
Ha decidido cambiar su discurso
Del "esperaba algo de rebaja, pero no esa barbaridad" al "si todos cedemos un poco, Sergio renovará". Entre estas dos frases de Avelino González, padre y agente de Sergio, hay un mes y medio de diferencia. La decepción inicial tras la primera reunión ha dado paso a la realidad del mercado y al deseo por parte del pivote de quedarse en A Coruña. Desde hace tiempo hasta el propio Sergio reconoce que tendrá que bajar su caché para seguir, pero la sorpresa de la primera oferta se ha disipado ante cómo están el resto de equipos. En aquella ocasión Avelino González hablaba de que les gustaría renovar por "dos años" y ahora no le da excesiva importancia a la duración del contrato.
