Márquez nunca perdona

Liga Adelante | Elche 1 - Las Palmas1

Márquez nunca perdona

Márquez nunca perdona

reportaje gráfico: fito gonzález

El punta sevillano empató el gol inicial de Santos

Marcos Márquez volvió a rescatar a su equipo de las cenizas para arañar un punto en su estadio talismán, el Martínez Valero. El goleador sevillano recuperó la senda del gol en un recinto que le trae suerte y que a su equipo, últimamente, se le está ajustando como anillo al dedo. Esta vez lo hizo en un partido en el que derrochó esfuerzo y sacrificio por el bien del colectivo. Esta vez, su premio llegó desde el punto de penalti. De oficio también debe saber vivir un delantero y el 9 canario no tuvo piedad a la hora de ejecutar una pena máxima que él mismo provocó. Caballero volvió a salir damnificado ante una de sus bestias negras.

El encuentro tuvo dos partes bien diferenciadas. La primera en la que el Elche fue el que mejores oportunidades dispuso. Los locales supieron conectarse pronto al partido gracias a que en su primera llegada cogieron ventaja en el marcador. Fue fruto de la fe, la que empujó a Saúl Fernández a no dejar que un balón se perdiera por la banda ante la pasividad de su marcador. Exprimió la jugada hasta la línea de fondo y desde ahí sacó un pase letal que tras pasar por delante de Miguel, que no acertó a mandar al fondo de las mallas, lo aprovechó Santos para adelantar a su equipo.

La ventaja benefició al juego del Elche y oxigenó sus ideas. Sobre todo, porque sin la necesidad de ir a por el partido y con el viento a favor que reflejaba el electrónico, es como mejor se manejan los de Claudio. Mientras que Las Palmas no tiró entre los tres palos antes del descanso, los ilicitanos tuvieron oportunidades suficientes para haber cerrado el partido. Un cabezazo de Fernando Niño, una ocasión de Santos y dos remates que se marcharon por encima del larguero de Miguel merecieron mejor premio, aunque el que perdona, al final, suele pagarlo. Y así fue.

Tras el paso por los vestuarios, el Elche decidió defender su renta y apuntillar a la contra a Las Palmas. El equipo pagó caro su conformismo ya que con sólo un gol de ventaja cualquier detalle puede provocar que los puntos se queden por el camino. El segundo acto fue un calco del primero pero con los papeles cambiados. Las Palmas dominó y tuvo sus oportunidades.

Resultó bonito el duelo entre Marcos Márquez y Fernando Niño. El delantero tuvo que echar mano de todas sus artimañas para encontrar el camino del gol que tanto le había esquivado en ocasiones anteriores. Esta vez fue gracias a un penalti discutido en el que tiró de veteranía para sacar petróleo de la entrada de Cobo. El árbitro premió su entrega y Márquez hizo el resto. El gol, junto a la lesión de Acciari minutos antes, provocaron el desconcierto del Elche que más que ganar, pudo haber perdido el encuentro. Saúl y David González pudieron poner la puntilla pero no estuvieron acertados.