Todos los futbolistas tienen un equipo al que consideran el más importante de su carrera, por diversas circunstancias, a menudo personales: porque allí tuvieron su primera ocasión de asomarse al gran fútbol o porque ese lugar les permitió expresar su mejor versión como jugadores. En el caso de Braulio, un delantero que en cuatro años, de 2005 a 2008, ha conocido cinco equipos (Atlético, Mallorca, Salamanca, Getafe y Zaragoza) el equipo al que más le agradece es el Salamanca, el rival del sábado: "El Salamanca es el equipo que me dio la vida en el mundo del fútbol", dice el delantero canario.
En el Helmántico, Braulio anotó 14 goles. Fue su mejor temporada hasta la fecha. De momento, ésta en el Zaragoza supone el reverso de sus alegrías en Salamanca. En lo que va de campaña, Braulio se ha encontrado con dos problemas que, sin embargo, ha procurado afrontar con la mejor cara posible y el máximo trabajo: la competencia con dos delanteros de una categoría superior como Ewerthon y Oliveira, por un lado;, y las dificultades que ha tenido hasta ahora para anotar goles. Hasta hace apenas unos días, por cierto. La casualidad ha querido que Braulio se cruce con el Salamanca sólo una semana después de sumar su primera diana como zaragocista.
La ocasión del sábado tiene, de esa manera, todos los aditamentos. Los individuales y los colectivos El Salamanca es líder y el Zaragoza le viene pisando los talones, al frente de un grupo de perseguidores que se mueven en un pañuelo de muy pocos puntos. El Salamanca ha convocado a cuatro aspirantes a su primera plaza para esta próxima jornada, y el Zaragoza es el que lo tiene mejor, porque juega un choque directo con el líder.
Reencuentro.
Braulio reconoce que el partido va a estar repleto de significados para él: "Va a ser un encuentro muy especial . Por un lado quiero marcar mi primer gol con el Zaragoza en La Romareda; pero, sobre todo, será un partido distinto porque me enfrento al Salamanca, el equipo que me dio la vida en el mundo del fútbol". Por allí pasó apenas con 21 años y dejó cierta huella. Para el que fuera delantero del Getafe, será "una ocasión de reencuentro con ex compañeros como Quique Martín, Gañán, Zé Tó o Jorge Alonso".
Respecto a la lucha por el ascenso, y contra muchas opiniones, Braulio ve al Salamanca en condiciones de mantener su reto hasta el final: "Hasta hace poco nadie daba un duro por ellos, y creo que a partir de ahora les van a ir las cosas bien". Y su deseo lo tiene claro: "Firmaría ahora mismo que al final subiésemos Zaragoza, Salamanca y Tenerife".
Competición le quitó la tarjeta
El Real Zaragoza decidió finalmente presentar alegaciones a la tarjeta amarilla que Martínez Franco, el colegiado del encuentro en Albacete, le mostró a Braulio en el minuto 24 "por derribar a un contrario", según reflejó en el acta del partido. Pero ayer el Comité de Competición atendió sus razones y le retiró la amonestación.
"En el Helmántico no celebraría un gol, pero en casa... no lo sé"
El partido del sábado va a traerle a Braulio muchos amigos, más recuerdos... pero demasiadas obligaciones: él necesita el gol para acabar de corregir su trayectoria individual, sus números, demasiado bajos a pesar de que ha disputado una buena cantidad de minutos y de encuentros como titular. Y el Zaragoza, a nivel colectivo, ansía ganarle los puntos al Salamanca por un motivo más o menos parecido: está en juego, en ambos casos, la autoestima y algo más. La posibilidad de que Braulio marque plantea la ya tópica pregunta de si lo celebraría o no. Braulio matiza: "En el Helmántico no, seguro, por todo lo que viví allí. Guardo un aprecio inigualable por esa ciudad y ese equipo. Pero si marco en La Romareda, no sé lo que haré". La verdad, Braulio no está para andar ahorrándose celebraciones.
