¿Qué tal se han portado las Navidades con usted?

Bien. Ha dado tiempo a descansar y desconectar del fútbol. Ahora se ha regresado a los entrenamientos, con muchas ganas e ilusión de volver a la rutina y jugar los domingos.

Menuda sorpresa encontrarse a Zigic al regresar...

Sí. Es curioso, porque es un jugador muy grande. Mire que yo soy alto pero al lado suyo da hasta susto... (risas) Cuando vine aquí para enfrentarme al Racing con el Nástic, perdimos 4-1 y sí que es un delantero muy difícil de parar; tiene una altura grandísima, es un jugador con mucha potencia y fuerza, un futbolista atípico a lo que te encuentras en un campo de fútbol. Siempre que te enfrentas a un equipo que tiene a un jugador como Zigic, hay que cambiar la forma de jugar.

Ahora lo bueno es que lo tiene de aliado, no sólo en las jugadas de ataque sino también en las defensivas.

Sí. Está claro que el fichaje de Nikola nos va a venir fenomenal. En ataque tiene facilidad de hacer goles y en defensa, para las jugadas de estrategia, va a ser un refuerzo de lujo.

Sobre su futuro, en su contrato figura una cláusula de renovación automática por un año si jugaba, entre esta temporada y la anterior, 40 partidos. Si sigue por este camino, seguirá un año más defendiendo la camiseta del Racing...

Es cierto, la cosa está así. Me imagino que si las cosas transcurren de forma normal, lo lógico es que se cumpla ese número de partidos. Por mi parte, yo estaría encantado de poder seguir aquí.

O sea, que todo marcha sobre ruedas en Santander.

Ojalá, aparte de esa cláusula de renovación, se pueda firmar algún año más. La verdad es que estoy muy a gusto en la ciudad y con ilusión de hacer cosas muy grandes en el Racing.

¿Podría a efectos legales, ya que aún no ha cumplido esa cifra de partidos, hablar con otros clubes?

No. Me imagino que si está firmada esa cláusula, está ahí para cumplirla. Repito que mi intención es llegar a ese número de partidos para llevarme la alegría de seguir aquí un año más. Por mi parte, la intención es la de conseguir un contrato de más larga duración para estar aquí más tiempo, pero todavía es pronto para hablar. Estamos a principios de enero y aún queda mucha tela que cortar.

Mañana toca el Valladolid...

Atraviesan por un momento bastante dulce. Tienen 26 puntos y están muy cómodos en la clasificación. Nosotros tenemos la intención de conseguir en estos tres partidos seis o siete puntos; no lo vemos como una final, pero sí como una oportunidad para empezar a sumar y alejarnos de los puestos de abajo.

El lunes hará de Rey Mago

César, al igual que el resto de la plantilla, acudirá a la Residencia Cantabria para hacer felices a los niños enfermos. Asegura que hay pocas cosas que le llenen más como persona: "Hay que echar una mano a la gente desfavorecida o enferma pasando malos momentos. Siempre que se pueda apoyar estas causas hay que hacerlo. Ver a un chavalillo que está malo en el hospital, le das un regalo y te devuelve una sonrisa grandísima, es precioso".