Di María gana enteros por el alto precio de Young

Young, del Aston Villa, es el extremo que más gusta a Juande Ramos, pero también es el más caro, ya que el Madrid no quiere gastarse más de 20 millones de euros. No obstante, en las oficinas del Bernabéu no cunde el pánico porque el inglés no es el último naipe de la baraja de futuribles que maneja el Real Madrid. Mijatovic tiene un as en la manga desde hace tiempo: Ángel di María (20 años). El montenegrino tiene cogida la matrícula a esta joya del fútbol argentino desde hace dos temporadas, cuando llevó a cabo varias gestiones para traérselo al Castilla, pero que al final no fructificaron.

El argentino gana enteros para ser, junto con Huntelaar, Parejo y Lass, el cuarto refuerzo invernal. Di María agrada mucho a la dirección deportiva por varias razones: es joven, puede disputar la Champions (el Benfica ha jugado la UEFA esta temporada) y su agente es Jorge Mendes, que mantiene una gran relación con Mijatovic y puede ayudar a cerrar la operación.

Gestifute.

La proyección internacional del futbolista se ha multiplicado después de que este verano se proclamase campeón olímpico en Pekín (Di María marcó el gol que dio el oro a la albiceleste) y la empresa Gestifute, controlada por Mendes, se dio cuenta del negocio adquiriendo el 30 por ciento de sus derechos.

El Benfica desembolsó por el argentino ocho millones de euros y su cláusula de rescisión es de 30 millones. Mijatovic quiere jugar su baza con el Benfica, al que como máximo le corresponderían 21 millones por el traspaso del futbolista, apoyado en Jorge Mendes, que le debe un favor después de que durante todo el verano el agente ilusionase al Real Madrid con el fichaje de Cristiano Ronaldo, al que también representa, y finalmente no viniese. La estrategia y los números cuadran...