No hay que darle más vueltas: hay messidependencia. Ayer quedó claro. Los portugueses vivían con la ilusión de poder vencer al Barcelona e incrementar su historia. Por primera vez superaron la fase de grupos y estarán en los octavos de final. Deseaban hacerlo como primeros de grupo, pero se toparon con un Barça serio, fuerte, tocador, coqueto y concentrado. Con un Xavi mandón (al que el Sporting le habilitó todo el espacio del mundo y un poquito más), Leo Messi comandó el ataque culé como le dio la gana. El argentino es sencillamente superior al resto: el mejor. Si él está sobre el terreno de jugo, los hombres de la zona media lo celebran; si el Pulga vacila a los defensas rivales, sus compañeros de ataque disfrutan con su imaginación. Messi es mágico, único en su especie.
A los seis minutos hizo que Carriço le atizara en la frontal, a los 13' ya había habilitado a Henry para que abriera el marcador y a la media hora, los espectadores del José Alvalade le brindaron la primera ovación de la fría noche lisboeta. Situado desde el inicio como hombre más avanzado, Messi caía a las bandas (más a la derecha), cosa que desesperaba a los zagueros locales. Luego, en la segunda, con la entrada al terreno de juego de Bojan (relevó a Henry), el crack finalizó su faena de aliño logrando el tercero de la noche, cruzando la bola ante la estatua Rui Patrício. Lo relevó Pedro. Interpreten como quieran, pero nueve minutos después de que se fuera Messi, el temblor de piernas y las carreras por llegar pronto al servicio fueron espectaculares.
Susto. La ventaja se redujo a un gol en sólo dos minutos: Polga y Liedson superaron a Valdés y las memorables remontadas al Dream Team en el Camp Nou, en Salamanca o el Calderón, parecían volver a la cabeza de más de uno. No estaba el argentino y el equipo andaba perdido. Pero el canguelo duró poco: Caneira también marcó, pero en propia puerta, y se cerró la ilusión portuguesa.
El Barça acabó goleando, está en octavos y ya se puede centrar en la Liga, en el tramo complicado. Venció bien, solvente y reconociendo que sí, que realmente el equipo padece messidependencia.
Paulo Bento: "Fueron muy superiores"
"Los jugadores desequilibrantes del Barcelona nos desarmaron con su talento, fueron muy superiores. No se puede hacer mucho ante un rival que mueve la pelota con esa velocidad y precisión. También pagamos muy caros nuestros errores, sobre todo alguna ingenuidad en el primero y el tercer gol. Dos tantos en propia portería y un penalti que no se vio muy claro son motivos suficientes como para doblegar a cualquier equipo. Con esto no quiero restar méritos a lo que hizo el Barcelona, que es un gran equipo, pero considero que el resultado es demasiado abultado, algo que no merecimos. Por un momento pensé que seríamos capaces de remontar el marcador, pero el tanto de Caneira nos hundió enseguida. De cualquier forma, nuestro objetivo ya estaba cumplido. Estaremos en la ronda de octavos de final, que es lo que nuestros aficionados y todos nosotros ansiábamos".
Guardiola: "Es muy bueno ser primeros"
"Quedar primeros del grupo es una muy buena noticia. No sabemos quién nos tocará, pero en teoría siempre es mejor la vuelta en casa. Hicimos una muy buena primera parte, y la segunda fue extraña, rarísima, parecía que se nos podía complicar. Se arregló con el gol de Caneira. En general dimos una buena impresión, como en toda la liguilla. Esperemos seguir así en los próximos partidos. Messi jugó de nueve porque ellos ponían un rombo, así no se encontraba con el pivote defensivo. Cambié a Henry por Bojan porque quería verlo de nuevo, y Thierry había hecho una buena primera parte. No tuve nada que ver en que Gudjohnsen le diera la pelota a Bojan para que tirara el penalti. Cáceres cumplió muy bien defensivamente, y estoy muy contento por él. No quisiera decir que puede ser el sustituto de Abidal, hay más jugadores y Sylvinho es el recambio natural, pero es bueno contar con más".
