Laporta se ata a Messi

Primera | Barcelona-Racing

Laporta se ata a Messi

Laporta se ata a Messi

enric fontcuberta

El presidente puede vivir ante el Racing la primera bronca

El Camp Nou reabre sus puertas para recibir a la Liga 2008-09. Lo hace con el ánimo disperso: esta noche se reunirán culés dispuestos a silbar a Joan Laporta (el voto de censura, la asamblea polémica, el feo a la Copa Catalunya, la costumbre) y a exigir del equipo mucho más de lo visto en el estreno, una derrota (1-0) en campo del Numancia.

Hay más protagonistas destacados. En el Racing, Ezequiel Garay, que estuvo cerca de fichar por el Barça, pero acabó en el Real Madrid, dicen que por falta de liquidez blaugrana. Garay se reencontrará con Leo Messi, ambos con polvo de oro olímpico en el pecho. Y Messi tendrá la oportunidad de aclararle a Maradona, que lo criticó por chupón, que su juego es así, la pelota, la pelota y siempre la pelota, para bien y también para no tanto. De paso, el Pulga será otra vez la tabla de salvación de Laporta si la noche se pone fea. Una vez más, el equipo tiene que mantener a salvo a la directiva.

Con 'jet-lag'.

Maradona era jugador del Barça la última vez que el Racing ganó en el Camp Nou (0-2, la temporada 1982-83, de infausto recuerdo culé). Ha llovido desde entonces, pero ahora los verdiblancos intentan sacudirse el plomo de las alas. Su técnico, Juan Ramón López Muñiz, anuncia que no van de víctimas.

Pep Guardiola convocó a Messi, uno de los viajeros con jet-lag, pero no a Márquez. Puede optar por alinear al Pulga para intentar resolver de entrada o guardarlo como revulsivo si van mal dadas. Muñiz tiene alguna duda en la banda derecha y la pareja de contención, y hará debutar a algunos de los fichajes exprés.

Leo responde a Maradona: "Seguiré igual"

Con cara de sueño y cansado, Leo Messi aterrizó ayer en Barcelona tras su periplo con Argentina, procedente de Lima (Perú). Lo esperaba un nutrido grupo de informadores, pendientes de una respuesta suya a las críticas de Diego Maradona, que lo acusó de jugar sólo para sí mismo. "No pasa nada. Estoy acostumbrado a que Diego hable. Siempre tiene cosas que decir de mí, pero no existe ningún problema. Yo continuaré jugando como siempre". La interpretación es libre.