El Camp Nou recibe con pañuelos y sonora pitada al Barça y a la directiva

Primera | Barcelona - Mallorca

El Camp Nou recibe con pañuelos y sonora pitada al Barça y a la directiva

La masa social culé está contra Laporta.

El Camp Nou ha expresado esta tarde su desacuerdo con la situación deportiva del FC Barcelona y antes del partido contra el Mallorca el desangelado feudo barcelonista ha hecho una gran pañolada contra el equipo catalán y contra sus dirigentes.

Antes del inicio del partido, algunos socios se habían congregado frente a la tribuna del Camp Nou donde mostraron su disconformidad con la junta directiva, hasta el punto de solicitar sin reservas la dimisión del presidente, Joan Laporta.

El mandatario barcelonista y sus compañeros de junta han tomado asiento en el palco presidencial bastantes minutos antes del partido, hecho poco habitual, ya que lo normal es que se incorporen instantes antes del encuentro. La escasa afición barcelonista que se ha acercado al feudo del Barça ha esperado a la salida de los dos equipos y del grupo arbitral para iniciar su protesta casi masiva.

Primero han sido pitos contra el equipo y después una pañolada casi unánime. La característica de esta protesta fue que se hizo preferentemente con pañuelos negros, incluso banderas negras, como las exhibidas por aficionados jóvenes del gol sur.

Pitos a Eto'o, Deco y Henry

La protesta se incrementó notablemente cuando el animador del Camp Nou cantó las alineaciones de las dos plantillas. Ningún jugador del Barça se libró de una sonora pitada, aunque tres de ellos, Eto'o, Deco y Henry, se llevaron la palma, como así también sucedió cuando se puso el balón a rodar. Cada vez que estos tres jugadores tocaban el balón, un sonoro clamor en contra desde el graderío irrumpía en sus acciones, como si fueran los jugadores más odiados del equipo rival.

Lo que ha vivido esta noche el Camp Nou ha sido una relación de amor y odio con su equipo, ya que mientras los pitos se los llevaban los tres jugadores citados, el aliento era para los de casa, como Messi y Puyol, dos de los futbolistas que más aplausos recogieron.

Además de esta protesta, hubo otra con las pancartas que cubrieron parte del estadio, la inmensa mayoría dirigidas contra la junta, aunque algunas de apoyo al técnico Frank Rijkaard, quien hoy dirigía por última vez al Barcelona en el Camp Nou, a la espera del último partido de Liga la próxima semana en el campo del Murcia para concluir su relación con el equipo catalán.

Pancartas

"Gracias Rijkaard por todo", "Laporta, vete de aquí", "Laporta dimisión" y "Socis, ens hem enganxat els dits amb La porta (Socios, nos hemos pillado los dedos con La porta -La puerta-)" han sido algunas de las docenas de pancartas que se han exhibido, ya que algunas de ellas han sido retiradas por tapar la publicidad contratada.

Pero sin duda, el que peor parado ha salido de las protestas ha sido Joan Laporta, contra quien han ido dirigidas la mayoría de los gritos. "¡Barça sí, Laporta no!" ha sido el clamor más escuchado durante los primeros compases de la primera parte.

En el minuto 16, Frank Rijkaard salió a dar una instrucción a sus jugadores y el campo se vino abajo con una gran ovación a la que continuó cánticos de "¡Rijkaard, Rijkaard!". Como no queriendo formar parte del espectáculo, el entrenador barcelonista se recogió a la carrera hacia su asiento en el banquillo de donde no volvió a salir.

Al minuto siguiente, Henry marcó el primer gol del partido y los ánimos se relajaron, no así cuando el grito de guerra era el de "¡Barça sí, Laporta no!".