Los aficionados españoles más jovenes se acordarán de Nourredine Naybet, por la huella que dejó en el Deportivo, o la figura de Mustapha Hadji por liderar a Marruecos durante su última participación en un Mundial. Pero entre los marroquíes existe un nombre ante todos, el de Larbi Ben Barek. Y este mito militó en las filas del Atlético durante la parte más recordada de su carrera (de 1948 a 1954).

Por eso era evidente el nombre que adoptaría la primera peña rojiblanca en Marruecos: Peña Atlética Larbi Ben Barek. Los integrantes de esta peña colchonera, la primera en Marruecos, tuvieron una inauguración de lujo, contando con gran parte de la directiva del Atlético, con Enrique Cerezo a la cabeza, y con otro mito rojiblanco, Enrique Collar, del que todos se acordaban por compartir equipo con Ben Barek durante los últimos años del astro marroquí en Madrid.

Hermandad. El joven Abdelaziz Lekhnifri, presidente de la peña, recordó durante la visita del Atlético en Marruecos que su agrupación quiere ser un puente entre Tetuán y Madrid para fomentar una relación fructífera entre los Atléticos de las dos ciudades. También resaltó la importancia del nombre que lleva la peña: "Nos enorgullece que Ben Barek haya podido jugar en un club tan importante como es el Atlético a nivel mundial y hay que tener en cuenta que La Perla Negra es un símbolo único aquí".

Ahmed Al Rhazani, tesorero de la peña, confesó lo importante que es la inauguración de esta agrupación: "Gracias al gran márketing que han tenido el Barça y el Real Madrid en los últimos tiempos, Tetuán ha pasado de ser una cuna atlética a estar dividida entre los dos gigantes de España". Ahora cree que esta dinámica va a cambiar: "Cuando éramos niños, solamente existía afición rojiblanca. Ahora el Atlético tiene una peña oficial en Tetuán mientras que los demás solamente tienen cafeterías que llevan sus nombres".