Don Santiago dio una vuelta a los puños de su camisa y sin quitarse la chaqueta, delante de su junta directiva, decenas de curiosos y de los medios de comunicación cogió el pico e hincó uno de sus extremos en la tierra de la parcela de Chamartín. Era el 27 de octubre de 1944. Su sueño de construir un gran estadio comenzaba. Tres años después, en 1947, el Madrid recibía a Os Belenenses para su inauguración.

Ya han transcurrido 60 años desde aquel simbólico bautizo ante los portugueses (el pasado viernes se cumplieron), y el partido de hoy servirá para homenajear a esta estructura de cemento que ha sido testigo de épicos éxitos deportivos y por la que han pasado muchos de los mejores futbolistas de la historia.

El club no ha querido hacer nada espectacular para no desviar la atención sobre el partido. Los luminosos de las puertas de acceso recibirán al público con mensajes de felicitación. Antes del encuentro se proyectará un vídeo con los mejores momentos de los 60 años del Bernabéu y habrá una amplia representación de la Asociación de Veteranos en el palco. Además, el speaker hará continuas alusiones al 60 aniversario.

La historia.

Poco después de entrar en el cargo, Santiago Bernabéu adquirió 537.200 pies cuadrados de terreno anexos a Chamartín por dos millones de pesetas. El coqueto estadio que existía desde 1924 llegó a tener 25.000 localidades. Insuficiente para la magnitud que iba adquiriendo la entidad. La obra del nuevo Chamartín costó 37 millones de pesetas y fue realizada por los arquitectos Monasterio y Alemany, que se quedaron con el proyecto tras participar en un concurso con otros siete candidatos.

El sueño de Bernabéu se concretó en un estadio con capacidad para 75.342 espectadores (de pie). Hoy, es la base de una moderna instalación que no ha parado de evolucionar en todo este tiempo hasta convertirse en Estadio de Élite. Antes de eso fue habitual lugar de celebración de la final de la Copa. Hasta 35 se han jugado. De ellas, el Madrid ganó dos y perdió cinco. Además, albergó tres finales de la Copa de Europa, una del Mundial, una de la Eurocopa (¡gol de Marcelino!)... muchas emociones en 60 años.

1944 PRIMERA PIEDRA

El 27 de octubre Santiago Bernabéu procede a la colocación de la primera piedra de la nueva construcción.

1947 La inauguración

El 14 de diciembre todo estaba listo para la inauguración ante Os Belenenses ante 75.000 espectadores.

1954 primera ampliación

Se construyen el Segundo y el Tercer Anfiteatro de la calle Padre Damián, conocido como El Gallinero.

1957 estadio iluminado

Antes del partido ante el Sporte Club Recife se llevó a cabo el primer encendido de las luces del estadio.

1982 blanqueo y techado

Para el Mundial del 82 se efectuó el blanqueo de la fachada y se cerraron tres cuartas partes de la grada.

1992 las cuatro torres y las tribunas alta y baja

Ramón Mendoza lleva a la práctica un ambicioso proyecto: la construcción de cuatro torres de evacuación. También se procede a la creación de las Tribunas Superiores Alta y Baja, con 22.000 cómodas plazas con butaca.

2004 se cierra la cubierta

Florentino lo moderniza por dentro, cierra la cubierta, coloca calefactores y amplía la grada lateral.

Calderón lo conoció en 1962

Ramón Calderón aún recuerda su primer partido como espectador en el Bernabéu. Fue un Madrid-Barcelona (2-0) de la temporada 62-63. Marcó los dos tantos Di Stéfano.

La Esquina vale 400 millones de euros...

El Madrid adquirió la parcela de la Esquina del Bernabéu (7.000 metros cuadrados) en 1927 por 642.000 pesetas. Hoy está valorada en 400 millones de euros. El próximo 2011 concluye el alquiler de La Esquina que el Madrid firmó con la empresa Urbis, que se construyó en 1991. Ahora, el club sopesa dos posibilidades, realquilar la instalación a Urbis o hacerse cargo del suelo para construir en vertical unos 3.000 metros cuadrados más. Eso cambiaría su fisonomía.

Corona será el invitado de honor

El Madrid ha invitado a Corona y Molowny al palco, pero sólo podrá venir el primero. Son los únicos supervivientes del partido inaugural de 1947. Corona aún lo recuerda: "Fue maravilloso saltar a ese campo recién hecho después de estar jugando en el Metropolitano. Aunque entonces el equipo no andaba bien, dimos una alegría a los aficionados ganando...".