Asier del Horno se fue de San Mamés con un disgusto de campeonato. Todavía ayer no se explicaba su roja ante el Almería, que complicó sobremanera el encuentro. No quería leer periódicos ni ver la televisión, aunque ya había presenciado la acción el domingo por la noche, desde una toma lateral que creía engañosa. El defensa está convencido de que tocó balón en su entrada a Bruno, por lo que solicitó al club que recurriese su expulsión ya en el mismo vestuario. Así se lo comunicó al delegado del primer equipo, Luis de la Fuente.
Después de examinar concienzudamente el vídeo, el ex colegiado Xabier Losantos Omar accedió a su petición, aun a sabiendas de que este tipo de reclamaciones por expulsión directa no suelen prosperar. Las alegaciones ya están hoy en el Comité de Competición, que dictará esta tarde sentencia.
Iraizoz apoyó la tesis de Del Horno al afirmar que había oído perfectamente el sonido del balón en la entrada. La duda está en si el impacto en la tibia al que se refiere González Vázquez no se produjo con la pierna derecha. El lateral del Almería, relevado en el descanso por los dolores que le provocó en el hombro la caída, dice que tiene marcada la zona.
Las esperanzas de que se acepte el recurso no son muchas, por lo que lo lógico es que el cedido del Valencia sea baja en Valladolid. En los últimos tiempos, el Athletic ha decidido protestar varias de las acciones que han terminado en roja. Nunca se han atendido sus peticiones. Sólo no lo hizo en la acción más clara, la que costó la expulsión a Koikili por una fea entrada a Giovani do Santos. La única batalla ganada fue la amarilla a Gorka Iraizoz en el Camp Nou, que costó un penalti inexistente.
Acta limpia.
Se malinterpretó por algunos medios y aficionados ayer la conversación entre Del Horno y el juez de línea al retirarse del campo en su tercera expulsión como jugador rojiblanco. "Para una p... falta que hago", gritó el defensa al asistente. Así que González Vázquez, entendiendo el acelntón del jugador, lo pasó por alto en el acta.
Por cierto, que la tarjeta a Asier Del Horno no es la única amonestación recurrida que afecta al partido Valladolid-Athletic. La entidad pucelana se ha movido para tratar de quitar una de las dos que vio su delantero goleador Joseba Llorente, expulsado en el tramo final del partido ante el Racing, justo después de que le fuese anulado un gol por llevarse la pelota con la mano. Lo lógico es que ni uno ni otro jueguen la próxima jornada.
Bruno: "La entrada no venía a cuento"
Bruno Saltor se sometió en la mañana de ayer a unas pruebas en el hombro derecho, lastimado en la caída propiciada por la entrada de Del Horno. Una luxación en el mismo le mantendrá dos semanas en el dique seco: "El golpeo me pilló en el aire y no me dio tiempo a apoyarme. Me caí de morros con todo el hombro", desveló a AS. El lateral catalán del Almería sostiene que "el dolor lo tengo en la tibia y una entrada a esa altura... Por suerte, no me cogió con el pie apoyado. Si lo hace, me rompe la tibia y el peroné, y sería roja más clara". Bruno no cree "que fuera a hacerme daño, pero yo no hago entradas así. No venía a cuento y es innecesaria". Asegura que el defensa gallartino "no tocó el balón, salió limpio" y que es "muy normal" que el Athletic recurra.
