Aunque Joaquín Caparrós no ha puesto las cartas boca arriba, la alineación del Athletic frente al Zaragoza parece cantada. La única duda del once con el que hacer frente a los maños radica en el acompañante de Aduriz. Dos futbolistas pelean por tal privilegio: Fernando Llorente y Joseba Etxeberria, a quien el técnico de Utrera ha empezado a utilizar como segundo delantero en los entrenamientos.
El técnico sopesa ofrecer una segunda oportunidad a Llorente después de haberle sentado en el banquillo ante el Barça. Está encima del riojano una y otra vez, porque sabe que su aportación es fundamental este año. De hecho, ayer le alineó junto a Aduriz, que estuvo renqueante tras un choque con Murillo, en el partidillo que cerró la sesión.
La otra posibilidad, nada desdeñable, es apostar por Joseba Etxeberria. Permitiría al equipo disfrutar de una mayor movilidad y, a la vez, mejorar la presión de la salida de la pelota de los centrales maños. El de Elgoibar se mostró ayer muy acertado en los diferentes ejercicios de remate de la hora y media de trabajo en Lezama.
Por lo demás, el once parece claro por las pistas ofrecidas: Iraizoz en la porter Iraola, Aitor Ocio, Amorebieta y Del Horno en la defensa; Susaeta, Javi Martínez, Tiko y David López en el centro del campo; con Aduriz y Llorente o Etxebe arriba. Es una alineación a la que la proyección hacia arriba de los futbolistas elegidos para las bandas le da un carácter ofensivo.
Susaeta jugará como interior en la banda derecha, donde actuó gran parte de los minutos en el Camp Nou y fue alineado en el filial ante el Zamora. David López actuaría en la izquierda. A expensas de la condición en que llegue Javi Martínez, en cuyo caso entraría Murillo, la única alternativa a discutir es el centro de la defensa. Teniendo claro que Aitor Ocio regresará al equipo tras su expulsión ante el Osasuna, Ustaritz será quien desaparezca de la alineación. Amorebieta parece gustar a Caparrós y ayer le mantuvo junto a Ocio en la prueba. El debut de Del Horno está cantado.
Vuelta al 4-4-2 de la pretemporada
Caparrós apostó de salida en la Liga con el 4-4-2 que ensayó en la pretemporada. Bajo ese patrón, el Athletic disputó los noventa minutos ante Osasuna. Sin embargo, prefirió modificar el esquema en el Camp Nou, para utilizar un 4-2-3-1 que no funcionó. De hecho, los mejores momentos rojiblancos llegaron en la segunda parte, cuando introdujo a Vélez por Gabilondo para regresar al 4-4-2. El equipo estuvo más junto y con salida hacia arriba. Salvo sorpresa, el dibujo ante el Zaragoza será. Es también el sistema que ha puesto en práctica Víctor Fernández, con Diego Milito y Oliveira arriba.
