Eric Abidal (Lyon, 11-07-1979) es un defensa que se dedica a defender (no como otros), a entorpecer a los rivales y que trata de no complicarse la vida con el balón en los pies. Su obsesión es correr, tapar huecos y conseguir que su portero no tenga que coger el balón del fondo de su portería. Defiende por que le gusta y no se suma nunca al ataque porque su religión futbolística no se lo permite. Muestra de ello es que después de jugar 160 partidos como internacional, aún no sabe lo que es conseguir un gol. Pero él se siente feliz de su logro; eso significa que cuando sale al campo cumple la obsesión en la cabeza.

Para evadirse del mundo, Abidal tiene la música como refugio. Le va el rap y se escuda en sus auriculares para concentrarse antes de los partidos, sean importantes o amistosos. En su cabeza sólo entra la palabra ganar. Acostumbrado a vencer, quiere seguir el mismo camino, aunque no sea con sus goles. Eso es para otros.