El entrenador del RCD Espanyol, Ernesto Valverde, no comparte la opinión de que su equipo no se juega nada mañana ante el FC Barcelona en el Camp Nou y declaró que sus jugadores deben "estar a la altura de lo que se espera" del Espanyol, por lo que cree que es "una prueba de fuego", y que saldrán a ganar porque quieren darse "ese gusto".

Valverde, además, dejó claro que no sabe nada de primas económicas y defendió la motivación de sus jugadores por ganar el derbi ante el Barcelona, asegurando que querer ganar "no es ningún delito" y que les ilusiona romper la mala racha del club en el Camp Nou, donde el último triunfo ''perico'' se remonta a la temporada 1981/82.

"Al final parece que si tienes tantas ganar de ganar es que estás primado. Parece que uno no tiene derecho a querer ganar un partido y no es ningún delito. No tenemos que estar bajo sospecha por querer ganar", afirmó el técnico, que afronta el choque como una oportunidad para que su equipo ratifique la gran temporada que ha realizado.

"El Espanyol lleva mucho tiempo sin ganar en el Camp Nou y se nos presenta una nueva oportunidad de la que debemos sacar partido. Tenemos que estar a la altura de lo que se espera de nosotros. Hemos levantado muchas expectativas y llegado a una final europea y nunca hemos perdido la cara a los partidos, sea fuera o en casa", señaló.

"Prueba de fuego" para el Espanyol

Por ello, cree que es "una verdadera prueba de fuego" para el Espanyol. "No estoy de acuerdo con la idea generalizada de que no nos jugamos nada. No nos jugamos nada en cuanto a los puntos, pero sí en cuanto a lo se espera de nosotros y a lo que nosotros esperamos. No vamos a ir tranquilos a ver qué pasa ni relajados", dijo.

Valverde también señaló que no deben "olvidar" su última visita al Camp Nou, a principios de curso en la Supercopa de España, en la que el Bara encarriló el triunfo (3-0) con dos goles en el primer cuarto de hora. "Hay que salir con un espíritu competitivo muy fuerte, tanto como ellos, porque sabemos cómo se las gasta el Bara", advirtió.

"No queremos ir a empatar, sino a ganar, porque nos queremos dar ese gusto. Es un buen partido y no tenemos que renunciar a la victoria", añadió Valverde, que quiere que su equipo sea capaz de "plantarle cara" al Barcelona, "sin faltarle al respeto, pero sin escondernos", dijo, y que deben tener voluntad de jugar al ataque.

Valverde, por otra parte, considera "improbable" que el azulgrana Ronaldinho de Assis juegue el partido, ya que está sancionado por una expulsión, pese a que el Barcelona ha recurrido el caso ante el Comité Español de Disciplina Deportiva, y dijo que si es anulada la sanción, la decisión incluso podría perjudicar al club barcelonista.

"No nos afecta para nada, pero veo improbable que juegue. No sé si sería justo, pero daría mucho que hablar y no sé hasta qué punto es incluso bueno para el Barcelona, aunque desde luego es un jugador importante que puede decidir un partido", comentó. A su entender, si Ronaldinho juega, el caso podría tener "otros efectos".

El técnico extremeño, por último, fue preguntado por las opciones de jugar en el Camp Nou de los jóvenes del filial españolista Angel y Julián, incluidos en la convocatoria, y explicó que, aunque un derbi requiere experiencia, ambos "han jugado partidos complicados, como la semifinal de la Copa de la UEFA", y podrían tener su oportunidad.