Creemos que Torres estará para jugar contra el Celta". Esta sentencia del doctor Guillén flanqueado por José María Villalón, jefe de los servicios médicos rojiblancos, y Genaro Borrás, su homólogo en la selección española, calmó los nervios de la hinchada rojiblanca, los del propio jugador y, a unos kilómetros de allí, los de Javier Aguirre. Las declaraciones de los galenos llegaban minutos después de que el capitán rojiblanco fuera sometido a varias pruebas en la clínica CEMTRO.
"El jugador sufre un esguince en su tobillo izquierdo de grado II-III", informó a la prensa Villalón, antes de que el doctor Guillén tranquilizara a la parroquia rojiblanca con el diagnóstico de la recuperación. Borrás coincidía con ambos al fijar "en torno a las tres semanas el periodo de recuperación para una dolencia así", pero también confluían los tres expertos en acortar el periodo tratándose de Torres. "Personalmente, mi apuesta es que jugará contra el Celta", aseguraba Borrás sin dudar, a pesar de que reconocía que el ligamento había sufrido una pequeñísima rotura. Concretamente, Torres sufre una microrrotura del ligamento peroneo-astragalino anterior con amplia extravación del líquido sinovial, por eso la denominación II-III del esguince. Sin embargo, todos coinciden en que la excelente constitución del jugador, la misma que le ha hecho ya reponerse en más de una ocasión en tiempo récord, le permitirá acortar la baja.
De hecho, su ausencia más amplia tuvo lugar en la campaña 2003-03, cuando una rotura de fibras le tuvo tres semanas en el dique seco. Esta misma temporada sufrió un esguince en ese tobillo frente al Betis. El jugador no disputó el partido frente a la Real por consejo médico, pero dos semanas después del percance brilló en Getafe con dos goles. El futbolista abandonó sonriente la clínica en una señal evidente de que su preocupación había disminuido.
En Majadahonda, Javier Aguirre mantuvo al término de la sesión de entrenamiento del Atlético un diálogo con Villalón. El médico informó al técnico mexicano del estado del futbolista. Ambos son optimistas sobre su evolución.
Ayer tarde ya empezó a tratarse
Fernando Torres ya ha empezado su cuenta atrás para estar ante el Celta el próximo día 9. El internacional del Atlético estuvo en la tarde de ayer en Majadahonda tratándose con los fisios del club madrileño. El tobillo del jugador aún está hinchado y el primer objetivo es tratar de que baje lo más pronto posible esa hinchazón. El jugador volverá a acudir hoy por la mañana a las instalaciones del Cerro del Espino y tanto el cuerpo médico como técnico consideran que el Niño llegará a tiempo para medirse al Celta. Una vez que baje la inflamación, el delantero empezará el trabajo en el gimnasio. El Niño no quiere perder ni un minuto para estar en condiciones.
