"El favorito es el Madrid; el resto a oír el transistor"

¿Qué se juega el Deportivo en este partido?

No nos jugamos la UEFA, la Intertoto o la Champions, y por suerte tampoco el descenso. Pero nos jugamos el prestigio y una satisfacción para nuestra afición. Eso para el amor propio de un equipo es mucho.

Usted siempre dice que a motivación no les puede ganar ningún equipo. ¿Piensa lo mismo en este partido?

La motivación despierta si existe la necesidad, y ellos la tienen de títulos. Tenemos que saber que se juega en un marco como el Bernabéu, que somos el centro de los focos...

Además usted ya sabe lo que es ganar en el Bernabéu.

Sí, me acuerdo. Fue con el Sevilla, 0-1 y gol de Baptista.

¿Es especial?

En la repercusión, sí. Si ganamos se multiplicaría, porque se juega la Liga. Pero será difícil porque el Real Madrid está en su mejor momento, por algo es el líder de la Liga.

¿No le preocupa ver lo que les pasó a Sevilla y Espanyol?

Me apunto a ese tipo de situación. Primero porque significaría que estamos haciendo un buen partido y luego, porque conocemos lo que han sufrido otros y podríamos manejar los últimos minutos. Todo pasa por estar unidos y sacar la calidad. El Bernabéu es un sitio idóneo para ello.

¿Veremos entonces un Deportivo valiente?

Intentamos jugar siempre igual, pero el fútbol es de los fubolistas. Jugamos un poco más dinámico contra Sevilla, Athletic o Valencia, pero son las circunstancias. El contrario tiene mucho que decir.

El año pasado perdieron 4-0, pero este año ganaron 2-0 en Riazor. ¿Qué pasará ahora?

No tiene nada que ver. Riazor fue un antes y un después para nosotros. Antes de ganar al Madrid, estábamos casi muertos. Sólo faltaba quitarle las gomas al cadáver y lo pusimos todo en el partido por nuestro futuro. Nos salió bien y creo que el marcador fue corto.

¿Quién cree que ha relanzado a este nuevo Madrid?

Ha habido una comunión de todas partes: aficionados, jugadores, cuerpo técnico, directiva, medios de comunicación... Se ha creado un estado de opinión en base a lo que ocurría. Ahora sólo se habla del posible título del Madrid.

¿Su escalada hacia el liderato ha sido por fe o por fútbol?

Ha sido un convencimiento. Hay que creer en las posibilidades. Están con una fuerza y una inercia que ganan partidos que parecen perdidos.

¿Quién es el favorito para ganar esta Liga?

Soy realista. El Madrid es el primero y por lo tanto depende de sí mismo. Es el favorito, los demás estarán pendientes del transistor. Si hace sus deberes, no tendrá que preocuparse de nada.

Qué papel le concede a Capello en todo esto?

Ha jugado un papel importante. Ha gestionado el vestuario y ha tomado medidas antipopulares que están dando sus frutos. Lo más fácil es seguir la corriente, pero la obligación de un entrenador es buscar lo mejor para el grupo. Las declaraciones de jugadores como Casillas, Guti, Raúl... hablan de implicación y compromiso. En eso tiene mucha culpa el cuerpo técnico.

¿Y Van Nistelrooy?

Me preocupa todo el equipo. El holandés está así porque sus compañeros están a un nivel muy alto. Hay que mirar como están Raúl, Guti, Beckham, los mediocentros... El Madrid ha cogido ahora el pulso. Sus jugadores tienen confianza y pueden cambiar un partido que está plano. Capello hace unos cambios y las cosas van. Pasó con Guti, Reyes... Hay calidad y los jugadores están con confianza.

¿Le han llamado Reyes o Sergio Ramos?

No, no me han llamado.

¿Y desde Sevilla?

No, no he tenido ninguna llamada. Saben que pondremos todo, pero luego son Raúl, Sergio Ramos, Aouate o Arizmendi los que deciden.

Se está hablando, y mucho, de primas y maletines...

No se está hablando de ellas más que el año pasado, ni se hablará menos que el que viene, ni tampoco que hace diez años. Con independencia de las primas, a un profesional le importa el marco donde juega y el prestigio que gana en campos como el Bernabéu.

¿Existen?

Bueno, puede que sí (risas). Pero un equipo no deja ser campeón por eso. La gente no puede creer que porque alguien se juegue la Liga y tú nada, dejes de correr y que asistas a un homenaje.

¿Y su futuro?

Como hace diez días. Ya hablé con el presidente, sabe de mi boca mis intenciones y ahora hay que esperar.