La selección española sub-17 ha comenzado con una importante victoria por 2-0 ante Francia su participación en el Europeo de la categoría, que se disputa hasta el 13 de mayo en Bélgica y que otorga cinco plazas para el Mundial que se celebrarán en la República de Corea entre el 18 de agosto y el 9 de septiembre.

Los de Juan Santisteban comenzaron tomándose la revancha ante la selección que les privó del título en 2004 y demostrando ser muy superiores a su rival, aunque fallando en exceso en los metros finales, al menos hoy, pero lo que encarrila su clasificación y ya piensa en los próximos partidos ante Ucrania, el viernes, y Ucrania, el día 7.

Nada más comenzar el partido, España presentó sus credenciales con dos oportunidades y dos córners botados en el primer minuto, un susto para los galos que no dio sus frutos, pero que sirvió para dejar clara la categoría de un gran equipo.

Jugó Bojan

La estrella del grupo y de la cantera del FC Barcelona Bojan Krkic y el delantero del Athletic Club Isma, dispusieron de sendas oportunidades, que no fructificaron, ya que fue otro azulgrana, Yago Falqué el encargado de abrir la cuenta.

El jugador gallego tuvo tiempo de colocarse en la frontal para mandar un magnífico zurdazo que abrió la cuenta para los de Santisteban muy sólidos y bien colocados y sólo preocupados por el trío de ataque galo compuesto por Saivet, Le Tallec y Bourgeois.

Una escapada de este último, que pilló a contrapié a la zaga española, a punto estuvo de constarle un susto, ya que el ariete del Metz encaró en solitario a David de Egea, que atajó su disparo en el 33. España parecía haber bajado el pie del acelerador y Francia comenzó a crear mayor peligro en los últimos minutos antes del paso por los vestuarios.

Muy vivos

En la reanudación, España volvió a salir más despierta y Bojan estuvo a punto de poner el 2-0 con un impecable lanzamiento de falta, cometida sobre él mismo, que se fue rozando la escuadra de la meta defendida por Joris Delle.

El azulgrana y el "gunner" Fran Mérida volvieron a poner en jaque a la zaga francesa, pero no fueron capaces de materializar sus ocasiones ante un equipo, muy inferior en calidad, que apostaba todo a la defensa y a algún balón a la contra.

España era muy superior y la victoria por la mínima era lo único que generaba dudas, ya que los galos apenas construían, pero Le Tallec volvió a dar un nuevo susto al encarar a De Egea, otra vez magistral, despejando a corner.

En ese momento, cuando Francia parecía que iba a creérselo, un balón largo de Aquino hacia Fran Mérida supuso el gol de la tranquilidad a pocos minutos del final en los que Francia obligó a lucirse de nuevo al portero del Atlético de Madrid.