Aguirre ha decidido bajar el nivel de exigencia de los entrenamientos esta semana. El objetivo del técnico es aliviar la tensión del campeonato y recuperar el mayor número de efectivos en una plantilla corta de jugadores. Aparte de los lesionados de gravedad, Maxi, Petrov, Miguel y ahora Valera, el mexicano tiene las bajas de Perea, Antonio López (entre algodones pero ambos con sus selecciones), Maniche y Pablo. El objetivo de los entrenamientos es mantener el ritmo, pero afrontar los once encuentros restantes con una mentalidad y predisposición fresca, además de reducir la fatiga física. En estos días la idea es que los jugadores disfruten del trabajo y se relajen, cosa que ya no podrán hacer prácticamente hasta la conclusión de Liga.

En la sesión de trabajo de ayer en Majadahonda, los rojiblancos empezaron con carrera continua, para seguir con toques de balón por parejas, algo de trabajo físico en el terreno de juego y un circuito con balón (se utilizaron balones más pequeños para mejorar la precisión en el toque). La sesión concluyó con un trabajo de resistencia seguido por un minipartidillo.

Las sesiones restantes estarán dedicadas a recuperar la fuerza de los jugadores. Hoy habrá otro circuito, pero esta vez para mantener el tono físico, mientras que mañana concluirán los tres entrenamientos de esta semana con un partidillo. Con éste se quiere que los jugadores no se olviden de la competición.

Aguirre ha concedido un descanso este fin de semana a sus jugadores. Este será el primero que tienen libre en el año 2007. El equipo volverá a entrenarse el lunes por la tarde, por lo que gozará de dos días y medio de descanso. Los internacionales tienen previsto volver el jueves, ya casi con el tiempo justo para preparar el trascendental partido ante el Mallorca.

Juan Iribarren es el encargado de la preparación física del equipo y todos han destacado el buen hacer de los rojiblancos en este apartado. Los problemas del equipo no son, precisamente, físicos. A partir de esta próxima semana los entrenamientos del Atlético reducirán las cargas de trabajo y se buscarán contenidos más específicos. Iribarren no ha dejado nada a la improvisación de cara a la recta final del campeonato. Pero ahora hay que recuperar jugadores.