El barro sienta al Kun

Copa del Rey | Levante-Atlético de Madrid

El barro sienta al Kun

El barro sienta al Kun

macario muñoz

Aguirre intentará remontar con Torres solo en punta

Hoy depende del estado del campo y mañana podrá ser del signo del zodiaco (como Domenech) o de si en ciertos estadios me entra miedo (como Cruyff) o de si con mi niño no se mete nadie (como Capello). Los entrenadores siempre tienen una razón, pero a menudo no tienen razón. El caso es que todo apunta a que Aguirre volverá a dejar a Agüero en el banco para remontar el 0-1 de la ida. El Atlético lleva cuatro partidos sin marcar, pero el mexicano considera que como el Kun es pequeño se va a ahogar en el barro del Ciutat de Valencia y que al no poder llevar catiuscas va a coger frío en los pies.

En Mallorca, el Atleti no metió miedo hasta que salió Agüero y comenzó a inventar. "Bueno, jugará el martes", pensamos todos. Pues bien, salvo cambio en función del césped, no. Entre los árbitros y Aguirre, vivo un continuo dèjá vú de mis años universitarios. Los primeros son ese amigo pesado que bebía demasiado y sabías que te la iba a liar, pero que siempre se enteraba de los planes y aparecía, así que te limitabas a minimizar daños y negar que le conocieras. El técnico es mi ex: de cada diez cosas que hace entiendo una, aunque si ella hubiera dado un par de ruedas de prensa semanales lo mismo me habría enterado más. Con él, ni por esas. Al menos parece que esta vez no habrá trivote y entrará Jurado (jugador de campo embarrado, como todos saben).

Granotas.

Mientras el Atleti subsiste entre turbulencias, el Levante demuestra poco a poco que tiene plantilla para dar sustos. En el Calderón, con los suplentes, fue muy superior y López Caro hoy ya no regalará nada. Para empezar sacará a Ettien, que provoca sudores en el aficionado rojiblanco sólo con verle calentar. Tampoco faltarán Nino, un asesino silencioso, ni Kapo que, sencillamente, es muy bueno. Ese es el equipo que defiende resultado. En el que debe remontar, un Torres en crisis jugará solo en punta. Y Agüero, bien resguardadito en el banquillo. Valentía pura.