El Atlético ha hablado con Jorge Méndez para que negocie con el Oporto la posible salida en el mercado de invierno de Ricardo Quaresma. Los rojiblancos siguen peinando el mercado, pese a que García Pitarch ha manifestado que van a aguantar ("salvo nueva lesión") con los jugadores que quedan. El club está a la expectativa en cuanto a los resultados que se puedan dar en los próximos partidos para ver si la plantilla responde.
Mientras tanto, no se quiere dejar nada sin atar y Jorge Méndez sondea a la directiva portuguesa. La intención del Oporto es no vender a uno de sus jugadores titulares, con una excepción. Si los de Jesualdo Ferreira no pasan la primera fase de la Liga de Campeones sí que darían luz verde a la salida de Quaresma. En este momento los blanquiazules no lo tienen nada fácil, son terceros de grupo con cuatro puntos (a dos del Arsenal y a tres del CSKA) y tienen que visitar al Hamburgo, a los rusos y viajar a Londres para medirse al Arsenal.
Aún así, su presidente, Nuno Pinto da Costa, no lo pondrá fácil. Quaresma tiene un gran cartel desde que destacara en el Sporting, cuando se referían a él como al nuevo Luis Figo. Su valor en el mercado ronda los trece millones, aunque las negociaciones podrían abrirse por más o menos la mitad.
Una de las ventajas con las que puede contar el Atlético es la devoción con la que Quaresma sigue cada la Liga. Siempre ha dicho que el fútbol español "es el que más me gusta del mundo", a sabiendas de que sus cualidades encajan en el fútbol que aquí se practica. De hecho, abandonó el Barcelona en 2004 con la intención de volver algún día a España.Quaresma achaca ese primer paso en falso en España a la juventud. Ahora cuenta con sólo 23 años, pero cuando recaló en Barcelona tenía 19. Sus dotes de extremo habilidoso, preferentemente por la derecha, y su velocidad hicieron que el Barça pagara por él seis millones al Sporting. Firmó cuatro años como blaugrana, pero no triunfó, no gozó de minutos como titular y en mayo de 2004 se fracturó un pie. Dos meses después firmó con el Oporto.
Condiciones. El Atlético debería esperar hasta el mes de enero para poder incorporar a un jugador procedente de otra Liga, excepto si el futbolista no tiene contrato en vigor. No tendría que esperar hasta enero si intentara incorporar a un jugador de otro club español, que no haya disputado cinco partidos, y diera la baja a alguno de sus lesionados de gravedad.
