El Barcelona es, estadística en mano, un rival fácil para que Torres acabe con la falta de goles que arrastra desde hace 17 partidos (diez de Liga, dos de esta temporada y ocho de la pasada; dos de Copa y cinco con la Selección). El año pasado le marcó tres: dos en el Camp Nou y uno en el Vicente Calderón. Una victoria y un empate. Cuatro puntos. El blaugrana es el tercer equipo que más goles ha encajado del ariete rojiblanco, cuatro; sólo al Mallorca, con cinco, y al Villarreal, seis, le ha metido más.

Por mucho que el Atlético se haya reforzado arriba, el Niño sigue siendo su referente. Si Torres no marca el Atlético ni golea ni gana. Su último gol en un partido oficial fue el pasado 3 de abril ante el Mallorca. Lleva cinco meses y trece días sin marcar y el Atlético otros tantos sin victoria y con tan sólo cuatro tantos (en doce partidos). Es la peor racha de su carrera. La otra se remonta a la segunda temporada atlética en el infierno: trece fueron los partidos del Niño sin goles. Han pasado tres años desde entonces y 55 goles de Torres. El año pasado obtuvo, por segundo consecutivo, el título de pichichi español.

A punto.

Mañana, en casa y con el Barcelona enfrente, parece la fecha idónea para que quiebre su racha y acalle los silbidos de los que han olvidado que sólo tiene 21 años y que lleva desde los 17 echándose a la espalda un club con más de cien años de historia. Una tendinitis en su rodilla derecha, además, impidió que realizara la pretemporada al mismo ritmo que sus compañeros. Pero el Niño ya está a punto, lo demostró en el entrenamiento del miércoles con cinco goles. Y el Barcelona siempre se le ha dado bien.

PÓLVORA MOJADA

Fernando Torres ha disputado 17 partidos oficiales sin marcar un gol. Dos de ellos son amistosos con la Selección que, aunque no clasificatorios, sí tienen carácter oficial.