Vanderlei Luxemburgo está tan convencido de que va contar con Robinho la próxima temporada que ya le ha preparado un plan específico alimenticio para fortalecerle físicamente. El técnico lo anunció el pasado martes en la localidad brasileña de Rio Claro, en una conferencia bajo el título: "Cómo convertirse en un ganador". A Luxemburgo le preguntaron: "¿Robinho va a ir al Madrid?, y respondió: "Va". Luego dejó frases como : "Los grandes clubes son dirigidos por la emoción. El presidente toma decisiones que jamás tomaría si fuera su empresa o negocio. Brasil ya no es el país del fútbol. No hay profesionalismo en los clubes y eso echa el fútbol hacia atrás, sino ¿por qué todos se marchan a Europa? Hoy Brasil es un simple formador de atletas".
Sus palabras han abierto una fuerte polémica en el país, donde desde hace meses consideran el fichaje de Robinho por el Madrid como un secreto a voces. El presidente del Santos, Marcelo Teixeira (en la imagen), no ha tardado en protestar: "Nadie puede decir con seguridad que Robinho va a jugar en el Real Madrid. Robinho tiene contrato hasta 2008 y su cláusula es de 50 millones de dólares. Garantizo que el jugador se quedará en el Santos por lo menos hasta la Copa del Mundo del 2006". Horas más tardes, las agencias informaban de que el Santos había rechazado una oferta del Madrid de 15 millones de dólares. Vagner Ribeiro, uno de los agentes del futbolista, lo explicó así: "Nos reunimos para entregar la propuesta del Madrid para la contratación de Robinho. Claro que no es de 50 millones de dólares. Se trata de una cuantía bien menor. Pero no voy a revelar los números".
Y Teixeira insiste: "Los medios de comunicación brasileños y europeos se están precipitando. Robinho va a continuar con nosotros y la afición del Santos puede estar tranquila con este tema".
La intención de Teixeira es que el jugador permanezca en su club hasta después del Mundial para volver a revalidar el título por tercera temporada consecutiva y tratar de conseguir el título en la Copa Libertadores en 2006. El presidente considera que Robinho se revalorizará tras el Mundial de Alemania y podrá sacar mucha mayor tajada de su traspaso a algún club europeo. No obstante, parece que podría conformarse con seis millones de euros más de los que ofrece en estos momentos el Madrid.
Pese a que le une una gran amistad con Teixeira, Robinho lleva tiempo afirmando que este es un buen momento para dar el salto y que, al contrario que Pelé, que militó toda su carrera en el Santos, él quiere jugar en Europa. Teixeira ha buscado todas las fórmulas posibles para retenerlo, pero será imposible que se salga con la suya.
Por otro lado, Luxemburgo aprovechó unos días de vacaciones para acudir a Punta del Este en Uruguay para participar en un torneo de poker. El técnico admitió su interés por Pablo García y Diogo: "Están pasando por un gran momento. No me gusta No me gusta hablar específicamente porque se genera una gran repercusión".
